Respuesta:
Ciro es un rey que se menciona más de 30 veces en la Biblia y se identifica como Ciro el Grande (también Ciro II o Ciro el Anciano) que reinó sobre Persia entre 539-530 a.C. Este rey pagano es importante para la historia judía porque bajo su mandato se permitió que los judíos regresaran por primera vez a Israel después de 70 años de cautiverio.
En una de las profecías más sorprendentes de la Biblia, el Señor reveló a Isaías el decreto de Ciro para liberar a los judíos. Ciento cincuenta años antes de que Ciro viviera, el profeta lo llama por su nombre y da detalles de la bondad de Ciro hacia los judíos: "Así dice el Señor a Ciro, Su ungido, a quien he tomado por la diestra, para someter ante él naciones. . .Te he llamado por tu nombre; te he honrado, aunque no me conocías" (Isaías 45:1, 4; ver también 41:2-25; 42:6). Evidenciando Su soberanía sobre todas las naciones, Dios dice de Ciro: "Es mi pastor, y cumplirá todo lo que yo quiero" (Isaías 44:28).
El decreto de Ciro liberando al pueblo judío, en cumplimiento de la profecía, está registrado en 2 Crónicas 36:22-23: "Y en el primer año de Ciro, rey de Persia, para que se cumpliera la palabra del Señor por boca de Jeremías, el Señor movió el espíritu de Ciro, rey de Persia, y este envió a proclamar de palabra y también por escrito, por todo su reino: "Así dice Ciro, rey de Persia: "El Señor, el Dios de los cielos, me ha dado todos los reinos de la tierra, y me ha designado para que yo le edifique una casa en Jerusalén, que está en Judá. Quien de entre ustedes sea de Su pueblo, suba allá, y el Señor su Dios sea con él"". Otros libros del Antiguo Testamento que mencionan a Ciro son Esdras y Daniel.
El rey Ciro ayudó activamente a los judíos a reconstruir el templo de Jerusalén bajo Zorobabel y el sumo sacerdote Josué. Ciro devolvió los tesoros del templo a Jerusalén y permitió que los gastos de construcción se pagaran con el tesoro real (Esdras 1:4-11; 6:4-5). La generosidad de Ciro ayudó a reanudar las prácticas de adoración en el templo que habían decaído durante los 70 años de cautiverio de los judíos. Algunos comentaristas indican que el decreto de Ciro de reconstruir Jerusalén fue el inicio oficial del judaísmo.
Entre los judíos deportados de Judá y posteriormente puestos bajo el gobierno de Ciro se encuentra el profeta Daniel. De hecho, se nos dice que Daniel sirvió al menos hasta el tercer año del rey Ciro, aproximadamente hasta el año 536 a.C. (Daniel 10:1). Siendo así, es probable que Daniel tuviera alguna participación personal en el decreto que se hizo en apoyo de los judíos. El historiador Josefo dice que Ciro fue informado de las profecías bíblicas escritas sobre él (Antigüedades de los judíos, XI.1.2). La persona que le habría mostrado los rollos a Ciro era Daniel, un alto funcionario de Persia (Daniel 6:28).
Además de sus tratos con los judíos, Ciro es conocido por su defensa de los derechos humanos, su brillante estrategia militar y su acercamiento de las culturas oriental y occidental. Fue un rey de enorme influencia y una persona a la que Dios utilizó para ayudar a cumplir una importante profecía del Antiguo Testamento. El uso que Dios hizo de Ciro como "pastor" de Su pueblo ilustra la verdad de Proverbios 21:1: "Como canales de agua es el corazón del rey en la mano del Señor; Él lo dirige donde le place".