Respuesta:
Los gabaonitas eran un grupo de personas descendientes de los amorreos (2 Samuel 21:2). Se describen en Josué 9 como personas que engañaron a los israelitas con el fin de protegerse. Después de que los israelitas hubieran derrotado a las ciudades de Jericó (Josué 6-7) y Ai (Josué 8), muchos de los cananeos cercanos se unieron para formar un gran ejército para luchar contra Israel (Josué 9:1-2).
Los gabaonitas, sin embargo, tomaron un enfoque diferente: "Y ellos usaron de astucia, y fueron a Josué y a los israelitas en el campamento en Gilgal, y les dijeron: 'Hemos venido de un país lejano; haced ahora alianza con nosotros'" (Josué 9:6).
Los israelitas no consultaron a Dios antes de acordar el tratado y cayeron en el engaño de los gabaonitas. Los israelitas pronto descubrieron que habían sido engañados y discutieron cómo responder. Los líderes de Israel decidieron que, "Hemos hecho juramento a ellos por el Señor Dios de Israel, y ahora no podemos tocarlos. Esto haremos con ellos, para que vivan y no venga sobre nosotros la ira de Dios a causa del juramento que les hicimos. Y los príncipes añadieron: Dejadlos vivir. Y fueron cortadores de leña y aguadores para toda la congregación, como los príncipes les habían dicho." (Josué 9:19–21).
El final de esta cuenta señala: "Y aquel día hizo Josué a los gabaonitas hacheros y aguadores para la congregación, y para el altar del Señor, hasta el día presente, en el lugar que él escogiese." (Josué9:27). En otras palabras, los gabaonitas sobrevivieron, pero sirvieron como esclavos a los israelitas durante generaciones. La tierra de Gabaa más tarde sería asignada a la tribu de Benjamín (Josué 21:17).
El rey Saúl más tarde rompió el tratado que Josué había firmado y atacó a los gabaonitas. Posteriormente, durante el tiempo del rey David, ocurrió una hambruna en Israel. Cuando David preguntó al Señor acerca de la hambruna, Dios dijo: "Por causa de Saúl, y de su casa sanguinaria, porque él mató a los gabaonitas." (2 Samuel 21:1). Para aplacar a los gabaonitas y poner fin a la hambruna, se les entregaron siete descendientes de Saúl para que fueran ejecutados (2 Samuel 21:6). Después de esto, Dios sanó la tierra de Israel (2 Samuel 21:14).
Aunque los gabaonitas eran enemigos de los israelitas, nos enseñan algunas lecciones importantes hoy. La estratagema de los gabaonitas fue efectiva porque Josué y su pueblo no consultaron primero a Dios para obtener sabiduría. Así, Josué 9 revela la necesidad de que los creyentes en Cristo oren en todas las decisiones importantes y busquen su voluntad antes de avanzar. Además, el hecho de que el Señor mantuviera a los israelitas en su pacto con los gabaonitas demuestra que Dios exige fidelidad de su pueblo. Romper un pacto es algo serio. Finalmente, la eventual incorporación de los gabaonitas a Israel muestra la misericordia y la gracia de Dios para todas las personas.