Respuesta:
El Hesicasmo es una forma de misticismo cristiano encontrada casi exclusivamente en la Ortodoxia Oriental, ganando popularidad en Grecia en el siglo XIV. El Catolicismo Romano y las denominaciones Protestantes no tienen equivalentes significativos a éste. El Hesicasmo tiene muchas similitudes con los conceptos budistas de meditación, pero mantiene un marco judeocristiano, en lugar de uno panteísta. La idea general en el Hesicasmo es utilizar la oración contemplativa, particularmente la repetición de "la Oración de Jesús", como un medio para experimentar la unión con Dios. Esto requiere que el Hesicasta bloquee todos sus sentidos y elimine todos sus pensamientos.
Supuestamente, el Hesicasmo está basado en el mandato de Jesús en Mateo 6:6. Allí, Jesús refuta las oraciones ostentosas de los hipócritas que quieren ser vistos orando en público. En lugar de eso, Jesús dice: “Mas tú, cuando ores, entra en tu cuarto, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público.” Los Hesicastas toman la referencia de Jesús a la oración secreta en un sentido extremo y absoluto. En particular, creen que Jesús pretendía que sus seguidores se separaran de todos los insumos sensoriales e intelectuales. En otras palabras, “entra en tu cuarto”, realmente significa “entra en ti mismo”.
Esta retirada hacia uno mismo se logra mediante una forma de oración contemplativa repetitiva. La Oración de Jesús es un canto litúrgico corto muy popular en la Ortodoxia Oriental: Κύριε Ἰησοῦ Χριστέ, Υἱὲ τοῦ Θεοῦ, ἐλέησόν με τὸν ἁμαρτωλόν ("Señor Jesucristo, Hijo de Dios, ten piedad de mí, pecador"). Los Hesicastas repetirán esta oración una y otra vez, buscando invocar el poder del nombre de Dios. Mientras lo hacen, los practicantes van cortando gradualmente su percepción de estímulos externos y eliminan todos los pensamientos ajenos. El objetivo final de este proceso es la theosis, una unidad personal con Dios.
El Hesicasmo considera las oraciones en cuatro categorías de valor ascendente: oración verbal, oración mental, oración de corazón, y contemplación. Cada tipo de oración es sucesivamente más interna, más separada de los estímulos externos. La máxima expresión de contemplación es una total ausencia de conciencia sensorial, una completa falta de pensamiento personal y una pura conexión con Dios.
Los métodos hesicásticos son similares, en muchos aspectos, a las prácticas de meditación oriental. Las palabras o pensamientos repetitivos en una búsqueda para desterrar el pensamiento independiente, rechazar el estímulo externo, y deshacerse de los deseos son aspectos esenciales de las prácticas de meditación panteístas. La meta de separarse a uno mismo del mundo exterior también es un componente común del misticismo oriental.
Sin embargo, el Hesicasmo, no es ni panteísta ni verdaderamente compatible con tales visiones del mundo. A diferencia de un budista o un hindú, el Hesicasta no está tratando de alcanzar un estado de no-ser. Más bien, la theosis deseada es una "unidad" con Dios similar a lo que se experimenta entre los miembros de la Trinidad. Otra diferencia está en el uso de la Oración de Jesús. En el Hesicasmo, el significado de las palabras, no las sílabas, es importante. Por lo tanto, la frase puede ser rezada en cualquier idioma, siempre que el practicante se enfoca en el significado pretendido de la oración.
El misticismo se basa en la búsqueda de "experimentar" a Dios a través del uso de rituales u otras técnicas. Todas las formas de misticismo están arraigadas en la suposición de que Dios solo puede ser verdaderamente "conocido" de alguna manera subjetiva o personal. Contrariamente al misticismo en general, y al Hesicasmo en particular, la Biblia nos ordena orar con un propósito e intención, no con el objetivo de eliminar nuestros propios pensamientos (Filipenses 4:6; Juan 16:23–24). Además, las Escrituras indican que Dios puede ser conocido objetivamente, o de lo contrario, no sería posible "examinar" o "probar" nuestra propia fe (1 Juan 4:1; 2 Corintios 13:5).
El comentario de Jesús en Mateo 6:6 nunca fue destinado a ser tomado como un mandato para ir "dentro de nosotros mismos". Fue y es simplemente una refutación de las anticuadas y ostentosas alharacas religiosas. Aunque el Hesicasmo no es exactamente lo mismo que las prácticas meditativas orientales, no es ni bíblico ni beneficioso.
