Pregunta: ¿Quiénes fueron Loida y Eunice en la Biblia?
Respuesta:
Solo hay una mención de Loida y Eunice en la Biblia. Ellas eran la abuela y la madre del joven discípulo de Pablo, Timoteo. En la segunda carta de Pablo a Timoteo, menciona la fidelidad de estas mujeres al criar a Timoteo con una fe tan devota y ferviente. El escribe: "trayendo a la memoria la fe no fingida que hay en ti, la cual habitó primero en tu abuela Loida, y en tu madre Eunice, y estoy seguro que en ti también" (2 Timoteo 1:5).
Eunice era una creyente judía que se había casado con un hombre griego (Hechos 16:1), lo que explicaría el hecho de que, siendo un bebé, Timoteo no fuera circuncidado como todos los niños judíos. Era responsabilidad de los padres judíos supervisar este rito, y, dado que el padre de Timoteo era griego, la circuncisión no habría sido su costumbre. Pablo hizo que Timoteo fuera circuncidado antes de empezar sus viajes misioneros juntos para no ofender a su público judío (versículo 3).
Loida era la madre de Eunice o su suegra. El hecho de que ayudó a criar a Timoteo puede indicar que el padre de Timoteo había muerto o que toda la familia vivía junta, lo cual no era inusual en aquellos días. Es posible que el padre haya muerto mientras Timoteo era joven, y que Pablo asume un rol paternal con Timoteo y a menudo se refiere a él como "verdadero hijo en la fe" (1 Corintios 4:17; 1 Timoteo 1:2, 18).
La crianza según los principios de Dios de Timoteo se menciona nuevamente en 2 Timoteo 3:14-15: "Pero persiste tú en lo que has aprendido y te persuadiste, sabiendo de quién has aprendido; y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras, las cuales te pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es en Cristo Jesús". La mención de Pablo a de "quién has aprendido" probablemente se refiere a la madre y abuela piadosas de Timoteo, Eunice y Loida, que le enseñaron las Escrituras judías desde pequeño. Ellas, junto con Timoteo, recibieron la enseñanza de Pablo acerca del Mesías y continuaron formando al joven Timoteo en los asuntos de Cristo.
Loida y Eunice son ejemplos de la poderosa influencia que una madre o abuela pueden tener en la vida de un joven. Muchos testimonios personales incluyen declaraciones como: "Mi mamá (o abuela) me llevó a la iglesia, me enseñó lo correcto y oró por mí todos los días". Pablo reconoció la influencia de estas dos mujeres en una época en la que rara vez se mencionaba a las mujeres por su nombre. Reconoció el impacto que tuvieron en la preparación de su joven discípulo, que más tarde se unió a Pablo en sus viajes (Romanos 16:21) y finalmente se convirtió en el pastor de la iglesia en Éfeso (1 Timoteo 1:3). Loida y Eunice deberían animar a todas las madres y abuelas cristianas, recordándoles que su influencia piadosa tiene un impacto eterno en las vidas y futuros de sus hijos y nietos.