Pregunta: ¿Qué significa tener amor el uno por el otro (Juan 13:35)?
Respuesta:
En Juan 13:35, Jesús establece el amor mutuo como la señal característica de todos los cristianos: "En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros". Para entender todo el significado del mandamiento de amarse los unos a los otros, es fundamental tener en cuenta todo el contexto de Juan 13.
Tras anunciar su inminente partida e insistir en que Sus discípulos no pueden acompañarlo en ese momento (Juan 13:33), Jesús pasa a describir lo que espera de ellos durante Su ausencia. Desafortunadamente, los discípulos continúan siguen con el hecho de que la partida de Jesús es inminente (versículos 36-38). Esto lleva a Jesús a ofrecer una larga explicación sobre Su partida. La esperanza es que Sus palabras reconforten sus corazones angustiados (ver Juan 14:1).
En Juan 13:34, Jesús da un nuevo mandamiento: "Un mandamiento nuevo os doy: Que os améis unos a otros; como yo os he amado, que también os améis unos a otros". Este es un mandamiento sencillo, pero constantemente fallamos en entenderlo y obedecerlo. Hay muchas razones para esto:
• No reconocemos la profundidad de nuestro pecado y egoísmo (Mateo 26:31–35; Marcos 9:33–37).
• No apreciamos el amor de Jesús (Juan 1:10–11).
• No nos medimos contra el estándar del amor de Jesús (Juan 13:1–20).
Lo que hace que el nuevo mandamiento sea "nuevo" no es que los discípulos nunca lo hayan escuchado antes. En Levítico 19:18, por ejemplo, Moisés escribe, "No te vengarás, ni guardarás rencor a los hijos de tu pueblo, sino que amarás a tu prójimo como a ti mismo. Yo soy el Señor" (NBLA). Y en Deuteronomio 6:5, "Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu fuerza" (NBLA).
Jesús también le enseñó a Sus discípulos que toda la ley y los profetas se resumen en los mandamientos de amar a Dios y amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos (Marcos 12:28–33). Entonces, ¿por qué Jesús dice que el mandamiento de amarnos los unos a los otros es nuevo?
La novedad del mandamiento se encuentra en una nueva norma: "como yo os he amado" (Juan 13:34). También puede haber una alusión al Nuevo Pacto, que prometía una transformación radical del corazón y la mente (cf. Jeremías 31:29–34; Ezequiel 36:24–26). En cualquier caso, se espera que los discípulos reflejen el mismo tipo de amor mutuo y unidad que existe entre el Padre y el Hijo (Juan 8:29; 10:18; 12:49–50; 14:31; 15:10).
Por lo tanto, el nuevo mandamiento es la respuesta apropiada a Dios que nos salva y nos hace Suyos (1 Juan 4:19). Y es mostrando amor el uno por el otro, que "conocerán todos que [somos sus] discípulos, si [tenemos] amor los unos con los otros" (Juan 13:35; cf. Mateo 5:16; Gálatas 6:10).
En su Apologeticus, Tertuliano informó que el mundo pagano admiraba el amor que los cristianos tenían el uno por el otro: "¡Mirad cómo se aman!... ¡Mirad cómo cada uno está dispuesto a morir gustosamente por el otro!" (capítulo 39). Esto es precisamente lo que Jesús quiso decir cuando dijo: "Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos" (Juan 15:13; cf. 1 Juan 3:16).
Nuestro amor por los demás debe reflejar el amor mutuo entre el Padre y el Hijo, así como el amor que Jesús tiene por nosotros, "como había amado a los suyos que estaban en el mundo, los amó hasta el fin" (Juan 13:1).
