Respuesta:
La ubicación exacta en el que Jesús fue crucificado es un tema de debate. En Mateo 27:33, Marcos 15:22, Lucas 23:33 y Juan 19:17 se dice que el lugar fue "Gólgota", el "lugar de la calavera". Los evangelios dan algunas otras pistas sobre la ubicación. Juan 19:20 dice que estaba “cerca de la ciudad”, lo que muy probablemente indica que estaba fuera de los muros de la ciudad. Marcos 15:40 dice que el lugar de la crucifixión de Jesús podía verse desde lejos, lo que probablemente significa que estaba en un lugar alto. Mateo 27:39 y Marcos 15:29 describen el lugar de la crucifixión como un lugar al que podían acceder peatones.
Los dos lugares propuestos más conocidos para la crucifixión de Jesús son la Iglesia del Santo Sepulcro y el Calvario de Gordon. La Iglesia del Santo Sepulcro es el lugar más tradicional y se remonta al siglo IV d.C. según los escritos de Eusebio. El Calvario de Gordon fue propuesto por primera vez a mediados del siglo XIX por Otto Thenius, Fisher Howe y Claude Conder, y luego se popularizó a fines del siglo XIX por Charles Gordon.
El problema de saber exactamente dónde crucificaron a Jesús es que Jerusalén ha sufrido grandes cambios en los últimos dos mil años. Grandes partes de la ciudad misma han sido destruidas y reconstruidas varias veces. La Iglesia del Santo Sepulcro se encuentra dentro de las actuales murallas de la ciudad, ¿habría estado fuera de ellas a principios del primer siglo? El Calvario de Gordon definitivamente está fuera de las murallas de la ciudad, pero ¿existía incluso en su forma actual a principios del primer siglo, o es el resultado de trabajos de excavación que han ocurrido en algún momento de los últimos 2,000 años?
El propósito de este artículo no es resolver el debate de dónde fue crucificado Jesús. Hay opiniones fuertes de ambos lados. Algunos están a favor de la Iglesia del Santo Sepulcro y otros a favor del Calvario de Gordon. También hay argumentos a favor de otros lugares.
Finalmente, la ubicación exacta de donde fue crucificado Jesús no importa. Cualquiera que sea la ubicación, no hay razón bíblica para reverenciarla. No hay poder espiritual ni bendición prometida en el lugar donde fue crucificado Jesús o donde fue enterrado. No estamos más cerca de Dios en la tumba debajo de la Iglesia del Santo Sepulcro o en la cima del Calvario de Gordon de lo que estamos en nuestras casas. Jesús fue crucificado, sepultado y resucitado (1 Corintios 15: 3-4). Eso es lo importante.