Respuesta:
Es casi seguro que Noé vivió en Mesopotamia, la tierra situada entre y alrededor de los ríos Tigris y Éufrates. La palabra griega Mesopotamia significa literalmente "en medio de los ríos" o "entre los ríos". El territorio generalmente comprende todo el valle del Tigris y el Éufrates, incluyendo la zona situada entre esos dos ríos y sus orillas hasta el Golfo Pérsico.
Hoy en día, la parte norte de Mesopotamia se llama Al-Yazira, la palabra árabe para "isla". Esta región del Medio Oriente forma parte del norte de Irak y se extiende hasta el este de Turquía y el extremo noreste de Siria.
Mesopotamia juega un papel notable en la historia del Antiguo Testamento, incluyendo la historia de Noé. Gran parte de la narración de los once primeros capítulos de Génesis se centra en esta región. El Jardín del Edén, donde comenzó la civilización, se encontraba en esta zona. Dos de los ríos del Edén son el Éufrates y el Tigris (Génesis 2:10–14).
Algunos de los antiguos relatos del diluvio que más se parecen a la historia bíblica del diluvio de Noé provienen de Mesopotamia. La Epopeya de Gilgamesh, el Génesis de Eridu, y Atrahasis son textos mesopotámicos que contienen sorprendentes similitudes con el relato bíblico del diluvio.
Después del diluvio, la Biblia afirma que el arca se detuvo en los montes de Ararat (Génesis 8:4), una región montañosa ubicada en la actual Turquía. Los montes de Ararat están en el límite norte de Mesopotamia. Por lo tanto, es probable que Noé y su familia también vivieran en Mesopotamia después del diluvio.
El primer rey de Mesopotamia después del diluvio fue Nimrod, el nieto del hijo de Noé, Cam (Génesis 10:8). El imperio de Nimrod abarcaba toda Mesopotamia, incluyendo lo que luego sería Babilonia y Asiria. El relato de Nimrod aparece en la historia de la mayoría de las culturas del Medio Oriente, y no solo en la del pueblo hebreo.
Aunque no podemos saber con certeza dónde se establecieron Noé y su familia después del diluvio, los descendientes de Noé fundaron varias ciudades, como Babilonia, Cala, Erec, y Nínive, todas ubicadas en Mesopotamia (Génesis 10:10–31). Mesopotamia también fue el lugar de nacimiento de Abraham (Génesis 11:27—12:4). La mejor suposición, basada en la evidencia bíblica, es que Noé vivió en o cerca de Mesopotamia.
