Pregunta: "¿Hay gente negra mencionada en la Biblia?"
Respuesta:
Podemos decir con bastante certeza que, sí, la Biblia menciona personas de piel negra, aunque, la Biblia no identifica específicamente a ninguna persona de piel negra. La Biblia tampoco identifica específicamente a ninguna persona de piel blanca. El color de la piel de una persona rara vez se menciona en la Biblia; el color de la piel no tiene sentido para el mensaje básico de la Biblia.
La gran mayoría de los eventos de la Biblia se llevaron a cabo en el Medio Oriente, en y alrededor de Israel. Ni gente 'negra' ni 'blanca' son comunes en estas regiones. La gran mayoría de la gente en la Biblia eran 'Semitas,' de marrón claro a oscuro en color. En definitiva, no importa de qué color de piel era la gente en la Biblia.
Algunos eruditos suponen que la esposa de Moisés, Séfora, podría haber sido negra ya que ella era una cusita (Números 12:1). Cus es un antiguo nombre para una zona de África. La sulamita pudo ser negra (Cantar de los Cantares 1:5), aunque el contexto indica que su piel era oscura debido a que trabajaba bajo el sol. Algunos proponen que Betsabé era negra (2 Samuel 11:3). Algunos creen que la reina de Sabá, quien visitó a Salomón, era negra (1 Reyes 10:1). Simón de Cirene (Mateo 27:32) puede haber sido negro, y también "Simeón llamado Níger" en Hechos 13:1. El eunuco etíope en Hechos 8:37 pudo haber sido un hombre negro. Los etíopes se mencionan alrededor de 40 veces en la Biblia, y podemos asumir que son referencias a los negros, ya que los etíopes son negros. El Profeta Jeremías preguntó, “¿Mudará el etíope su piel…?” (Jeremías 13:23) - la suposición natural es que Jeremías se refiere a la piel negra.
La mayoría de los maestros de la Biblia cree que los negros son descendientes del hijo de Noé, Cam (Génesis 10:6-20), pero no podemos estar seguros porque la Biblia no lo dice específicamente. Cuando se trata del color de la piel, la Biblia guarda un silencio constante. El color de la piel no es tan importante para Dios como la condición del corazón. El evangelio es una buena noticia universal. Los negros, los blancos y todos los tonos intermedios están invitados a venir a Cristo para la salvación. Por la gracia de Dios podemos quitar los ojos de la piel y enfocarnos en el alma.