Pregunta: ¿Qué significa que el infierno sea considerado como el lago de fuego?
Respuesta:
El lago de fuego es una expresión que solo es usada en unos pocos versículos cerca del final del libro del Apocalipsis (Apocalipsis 19:20; 20:10, 14, 15; 21:8). Jesús se refirió a la Gehena/infierno varias veces (Mateo 10:28; Marcos 9:43; Lucas 12:5), así como a las "tinieblas de afuera" (Mateo 8:12; 22:13). Todas parecen ser diferentes referencias a la misma cosa. El infierno, el lago de fuego y las tinieblas de afuera son todos términos que describen el destino final de aquellos que rechazan a Cristo. Este es un estado de completa separación de Dios, interminable e inevitable.
Según la Biblia, el lago de fuego es la "muerte segunda". Esta es la mayor consecuencia del pecado, que es estar totalmente separado de Dios. El lago de fuego será un lugar de sufrimiento y miseria perpetua. La Escritura dice que toda persona cuyo nombre no esté en el Libro de la Vida será arrojada al lago de fuego (Apocalipsis 20:15). El lago de fuego también será el destino final de la bestia y del falso profeta (Apocalipsis 19:20), así como del propio Satanás (Apocalipsis 20:10). La Biblia indica que tanto la muerte como el Hades, el destino temporal de los muertos que no han sido salvos, también serán arrojados al lago de fuego (Apocalipsis 20:14).
Aunque el infierno se describe utilizando términos como fuego y llama, no se debe pensar en él solo como un lugar físico. El infierno se describe como un lugar de "tormento", no de "tortura", inicialmente destinado a seres puramente espirituales (Mateo 25:41). De hecho, el peor aspecto del infierno es una eternidad de separación consciente, culpable y vergonzosa de Dios y de todas las formas de bondad. En ese sentido, el infierno es mucho peor que un infierno literal; un infierno puramente físico no es en realidad tan terrible como lo describe la Biblia.
En otras palabras, la Biblia nos dice a como es el infierno, utilizando símbolos como el lago de fuego. Pero las Escrituras no nos dicen demasiado acerca de lo que "es" el infierno, de forma directa.
El fuego se utiliza a menudo como un símbolo del juicio de Dios. El simbolismo proviene de ejemplos reales del uso del fuego por parte de Dios para castigar a los malvados: por ejemplo, la destrucción de Sodoma y Gomorra (Génesis 19:24), y la destrucción de los enemigos de Elías (2 Reyes 1:12). En varias ocasiones, los profetas describían a Dios con un torrente de fuego que salía de Su trono, un símbolo de Su santo castigo por el pecado (por ejemplo, Daniel 7:10; Isaías 30:33). El hecho de que el destino de los que rechazan a Dios se describa como un "lago de fuego" habla la gravedad del juicio. Cuando Dios finalmente elimine el pecado y la muerte, todos los pecadores serán condenados al peor destino posible, descrito en la Biblia usando los términos más horribles.