Pregunta: ¿Qué significa trabajar la salvación con temor y temblor (Filipenses 2:12)?
Respuesta:
En Filipenses 2:12-13, Pablo escribe, "Por tanto, amados míos, como siempre habéis obedecido, no como en mi presencia solamente, sino mucho más ahora en mi ausencia, ocupaos en vuestra salvación con temor y temblor, porque Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por su buena voluntad".
Este texto a menudo se malinterpreta para infundir miedo en las personas, advirtiéndoles que significa que pueden perder la salvación. ¿Qué significa trabajar nuestra salvación con temor y temblor? Difícilmente Pablo puede estar alentando a los creyentes a vivir en un estado continuo de nerviosismo y ansiedad. Eso contradiría sus muchas otras exhortaciones a la paz mental, coraje y confianza en el Dios que es autor de nuestra salvación. La palabra griega traducida como "temor" en este contexto puede significar igualmente "reverencia" o "respeto". Pablo usa la misma frase en (2 Corintios 7:15) cuando se refiere a Tito al ser alentado por la recepción de los corintios “con temor y temblor”, es decir, con gran humildad y respeto por su posición como ministro del evangelio de Jesucristo. Pablo mismo llegó a la iglesia corintia en “debilidad, y mucho temor y temblor” (1 Corintios 2:3), consciente de la gran y asombrosa naturaleza del trabajo en el que estaba comprometido.
El sentido en el que debemos trabajar nuestra salvación con temor y temblor es doble. Primero, el verbo griego traducido como “trabajar” significa "trabajar continuamente para llevar algo a cabo o a buen término". Hacemos esto al buscar activamente la obediencia en el proceso de santificación, lo cual Pablo explica más adelante en el siguiente capítulo de Filipenses. Se describe a sí mismo como "esforzándose" y "prosiguiendo" hacia la meta de la semejanza a Cristo (Filipenses 3:13-14). El "temblor" que experimenta es la actitud que los cristianos deben tener al perseguir este objetivo - un sano temor a ofender a Dios a través de la desobediencia y un asombro y respeto por Su majestuosidad y santidad. "Temblor" también puede referirse a un temblor debido a la debilidad, pero esta es una debilidad de propósito superior, uno que nos lleva a un estado de dependencia de Dios. La obediencia y la sumisión al Dios al que reverenciamos y respetamos es nuestro “culto racional” (Romanos 12:1-2) y trae gran alegría. Salmo 2:11 lo resume perfectamente: “Adoren al Señor con reverencia, Y alégrense con temblor” (NBLA). Trabajamos nuestra salvación yendo a la misma fuente de nuestra salvación - la Palabra de Dios - donde renovamos nuestros corazones y mentes (Romanos 12:1-2), entrando en Su presencia con un espíritu de reverencia y asombro.