Respuesta:
El Pacto Edénico es el pacto que Dios hizo con Adán en el Jardín del Edén. Este pacto también se llama a veces el "Pacto de las Obras" y es el primer pacto que Dios hizo directamente con el hombre.
En las Escrituras vemos dos tipos diferentes de pactos que Dios hace con la gente. Algunos son pactos incondicionales, que Dios mantendrá independientemente de las acciones humanas. Otros son condicionales en el sentido de que el pueblo debe obedecer los términos del pacto para recibir las promesas relacionadas con él. El Pacto Edénico es un ejemplo de un pacto condicional porque Adán tuvo que obedecer los términos del pacto para no sufrir las consecuencias de romperlo.
El Pacto Edénico, o Pacto de las Obras, se puede encontrar en los capítulos iniciales del Génesis donde Dios hace algunas promesas condicionales a Adán. El Pacto Edénico no se llama explícitamente un pacto en Génesis, sin embargo, más adelante se le llama un pacto en Oseas 6:7, "Mas ellos, cual Adán, traspasaron el pacto; allí prevaricaron contra mí".
Mientras que algunos teólogos enumerarán hasta seis obligaciones diferentes que Adán debía cumplir, el corazón del Pacto Edén es en realidad el mandato de Dios a Adán de no comer del "árbol del conocimiento del bien y del mal" (Génesis 2:16-17). Ese mandamiento establece la promesa de Dios, así como el castigo si Adán desobedece.
En el Pacto Edénico, Dios promete a Adán la vida y la bendición, pero esa promesa está condicionada a la obediencia de Adán al mandamiento de Dios de no comer del fruto del árbol del conocimiento del bien y del mal (Génesis 2:16-17). El castigo de Adán por la desobediencia sería la muerte física y espiritual, así como una maldición sobre la tierra, de modo que Adán tendría que trabajar más duro para obtener cosechas. Uno de los resultados del pecado de Adán fue que tendría que trabajar todos sus días hasta su muerte (Génesis 4:17-19).
Este pacto juega un papel importante en el desarrollo del plan de redención de Dios, ya que muestra la incapacidad de los humanos para mantener una relación correcta con Dios incluso cuando están en el paraíso terrenal que Dios creó para ellos.
El pecado de Adán rompió este pacto condicional con Dios y dejó a la humanidad en un estado de caída, sin embargo, Dios pronto haría un segundo e incondicional pacto de redención con Adán y Eva (Génesis 3:14-24). Al igual que el Pacto Edénico, éste no se menciona explícitamente como un pacto en Génesis, pero es una promesa significativa que Dios hace a la humanidad. Es la primera promesa de redención y la primera promesa de la venida de Cristo (Génesis 3:15). Aquí, a sólo tres capítulos de este notable libro, Dios ya nos da la esperanza de un Redentor. A Génesis 3:15 se le llama a veces el Protoevangelio, el primer anuncio del evangelio en las Escrituras. La promesa de Dios para Eva de que la simiente de la serpiente heriría el talón de la simiente de Eva y la simiente de Eva heriría la cabeza de la simiente de la serpiente, es la profecía de que Satanás heriría a Cristo en la cruz, pero que Cristo triunfaría sobre Satanás en esa misma cruz.
Tanto el Pacto Edénico como el Pacto de Redención que sigue son significativos por varias razones. En primer lugar, establecen un patrón que se repite a lo largo de las Escrituras: 1) el hombre peca, 2) Dios juzga el pecado, y 3) Dios otorga gracia y misericordia proveyendo una forma de redimir al hombre y restaurar la relación del hombre con Dios. En segundo lugar, los pactos nos muestran que el pecado siempre tiene consecuencias. Entender los diferentes pactos del Antiguo Testamento y su relación entre sí, es importante para comprender la relación de pacto de Dios con Su pueblo elegido, así como Su plan de redención revelado en las Escrituras.
