Respuesta:
El sincretismo, según la definición del American Heritage Dictionary, es "la reconciliación o fusión de diferentes sistemas de creencias". Esto se hace más evidente en las áreas de la filosofía y la religión, y generalmente resulta en una nueva enseñanza o sistema de creencias. Obviamente, esto no se puede relacionar con el cristianismo bíblico.
El sincretismo religioso tiene lugar cuando se introducen creencias extranjeras en un sistema de creencias autóctono y las enseñanzas se mezclan. Así, la nueva y heterogénea religión adquiere una forma propia. Esto se ha visto claramente en la historia misionera católica romana. Por ejemplo, el proselitismo de la Iglesia Católica Romana en la Sudamérica animista. Amenazados con el miedo a la muerte, los nativos fueron bautizados en la iglesia por decenas de miles sin que se hubiera predicado el Evangelio. Los antiguos templos fueron arrasados y se construyeron santuarios y capillas católicas en el mismo lugar. Se permitió a los nativos sustituir las oraciones a los santos y no a los dioses del agua, la tierra y el aire, y sustituyeron sus antiguos ídolos por nuevas imágenes de la Iglesia Católica Romana. Sin embargo, la religión animista que los nativos habían practicado anteriormente nunca se sustituyó del todo, sino que se adaptó a las enseñanzas católicas y se permitió que este nuevo sistema de creencias floreciera.
En la actualidad, el sincretismo religioso puede verse en sistemas religiosos como la Nueva Era, el hinduismo, el unitarismo y la ciencia cristiana. Estas religiones son una mezcla de múltiples sistemas de creencias diferentes, y evolucionan continuamente a medida que las filosofías de la humanidad suben y bajan en popularidad.
Ahí está el problema, ya que el sincretismo se basa en el capricho del hombre, no en la norma de las Escrituras. La Biblia deja muy claro lo que es la verdadera religión. Piensa en sólo algunas cosas que se declaran en la Escritura: "Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente" (Deuteronomio 6:5; Mateo 22:37); "Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí'" (Juan 14:6); "Hizo además Jesús muchas otras señales en presencia de sus discípulos, las cuales no están escritas en este libro. Pero éstas se han escrito para que creáis que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y para que creyendo, tengáis vida en su nombre" (Juan 20:30-31); y "Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos" (Hechos 4:12).
El sincretismo religioso simplemente no es compatible con el verdadero cristianismo. De hecho, cualquier modificación de la ley y los principios bíblicos en aras de una religión "mejor" es una herejía (Apocalipsis 22:18-19).
