Pregunta
¿Qué es la rehabilitación cristiana? ¿Cuándo debería un cristiano considerar ir a rehabilitación?
Respuesta
La adicción es un problema serio con efectos de gran alcance. Muchas veces, el comportamiento de una persona se vuelve tan arraigado y perjudicial que necesita tratamiento en un programa formal de rehabilitación para comenzar el proceso de recuperación. Coloquialmente referido como "rehab", la mayoría de los programas de tratamiento incluyen desintoxicación, terapia de grupo, psico-educación, introducción a grupos de apoyo externos (generalmente programas de 12 pasos) y asesoramiento individual. Muchos centros de tratamiento también proporcionan apoyo psiquiátrico para doble diagnóstico (como tratamiento para la depresión subyacente o trastorno bipolar), programas para miembros familiares afectados y entrenamiento en habilidades para la vida. Se suele pensar en la rehabilitación como un programa de internación, aunque existen instalaciones de rehabilitación ambulatoria.
Hay muchas similitudes entre los centros de tratamiento, pero cada uno tiene una mezcla única de programas y fundamentos teóricos. Algunas instalaciones de rehabilitación se promocionan como cristianas. Aunque los enfoques específicos pueden diferir, las rehabilitaciones cristianas consideran a Dios como el sanador principal para superar la adicción e incorporan los principios cristianos en el proceso de recuperación. Muchos centros cristianos ven la adicción como un problema principalmente espiritual, con co-factores biológicos, sociales y emocionales. A menudo se vincula la adicción con el deseo de llenar un vacío o el miedo a enfrentar emociones dolorosas. Los cristianos comprendemos que solo Dios puede satisfacer plenamente y que él puede llevar nuestras penas (Mateo 11:28-30; 1 Pedro 5:7; Juan 16:33). La rehabilitación cristiana también ve la espiritualidad como una vía de curación. La sustancia de abuso claramente no puede tomar el lugar de Dios; desarrollar la relación de una persona con Dios le ayudará a dejar de usar. En la mayoría de la rehabilitación cristiana, entonces, los pacientes reciben apoyo físico, psicológico e intelectual, así como orientación espiritual. La verdad bíblica se convierte en una herramienta clave de tratamiento.
Tanto la Biblia como la sociedad hablan en contra de la adicción, pero esto no hace a los cristianos inmunes a la lucha. En Cristo somos liberados del pecado (Romanos 6:6-11; 8:2; Juan 8:36). Sin embargo, también debemos hacer un esfuerzo para vivir en esa libertad. Pablo habla sobre la lucha del cristiano contra el pecado en Romanos 7. En Efesios 4:22-24 Pablo escribe: "En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos, y renovaos en el espíritu de vuestra mente, y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad". No hay vergüenza en pedir ayuda para quitarse el viejo hombre. Los cristianos no solo tienen el poder del Espíritu Santo para ayudarles a superar la adicción, sino que también tienen el Cuerpo de Cristo, que está diseñado para ser un sistema de apoyo. Los cristianos deben ser buenos administradores de los recursos disponibles para ellos. La mayoría de las iglesias individuales no están equipadas para manejar las complejidades de la adicción. Pero existen muchas instalaciones de tratamiento cristianas para funcionar como el Cuerpo de Cristo para un adicto.
Si un cristiano se encuentra gobernado por una adicción, puede querer considerar ingresar a un programa de rehabilitación. Un programa de rehabilitación cristiano tiene los beneficios de reconocer al verdadero sanador y de abordar el corazón espiritual de los problemas de adicción. Sin embargo, debería mencionarse que algunas "rehabilitaciones cristianas" no siguen los estándares médicos y psicológicos actuales en la prestación de tratamiento para la adicción. Algunos también pueden tener creencias teológicas defectuosas. Algunas rehabilitaciones no cristianas ofrecen programas pobres o tienen posturas teóricas defectuosas también. Antes de ingresar a cualquier programa de rehabilitación, conviene a un posible paciente (o miembro de la familia) examinarlo completamente. Asegúrese de que el programa aborde cada aspecto de la adicción (espiritual, físico, psicológico y social), que haya personal médico competente disponible y que los pacientes sean tratados con cuidado y respeto. La mayoría de las rehabilitaciones tienen copias de sus planes de tratamiento disponibles para quienes los soliciten.
Si usted o alguien que conoce está atrapado en una adicción, puede querer considerar posibles planes de tratamiento. Un consejero, psiquiatra o médico en su área puede dirigirlo a una instalación. También podría considerar el uso de christianrehabs.com en su búsqueda.
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