Respuesta:
Arauna el jebuseo fue un cananeo que vendió al rey David un terreno y suministros para hacer un sacrificio al Señor, aunque él mismo no parece haber sido un creyente en el Dios de Israel. La tierra comprada a Arauna fue eventualmente utilizada como el lugar del templo en Jerusalén.
La historia de Arauna y su era está relacionada a la del pecaminoso censo de David en 2 Samuel 24. El rey David ordenó un censo de los hombres de combate de Israel; este censo era contrario a la voluntad de Dios. (Quizás el censo era una fuente de orgullo o una señal de que David estaba confiando en la fuerza de sus hombres y no en la fuerza del Señor). Como resultado del pecado de David, Dios le dio a David una elección: tres años de hambre, tres meses de huida ante sus enemigos, o tres días de pestilencia. David eligió el último, como explica en el versículo 14: "Estoy muy angustiado. Te ruego que nos dejes caer en manos del Señor porque grandes son Sus misericordias, pero no caiga yo en manos de hombre" (2 Samuel 24:14, NBLA). Por lo tanto, Dios envió una plaga sobre el pueblo, y murieron 70,000 hombres de Israel (debilitando significativamente la fuerza de combate que acababa de ser contada). Al final del tercer día, el Ángel del Señor estaba a punto de destruir Jerusalén, pero se arrepiente. Cuando la plaga se detiene, el Ángel del Señor estaba parado en la era de Arauna el jebuseo (versículo 16).
Segunda de Samuel 5 relata la conquista de Jerusalén por David, que originalmente pertenecía a los jebuseos. Durante los primeros siete años de su reinado, David reinó en Hebrón sobre Judá y Benjamín. Pero después de que todas las tribus se unieron bajo él, quería fundar una nueva capital. Escogió Jerusalén, una fortaleza de los jebuseos, algunos de los habitantes cananeos originales del área. David los derrotó y tomó la ciudad. Aunque Dios había ordenado que todos los cananeos fueran exterminados debido a su gran pecado (Levítico 18:24-25), esto nunca sucedió, ni siquiera en tiempos de David. A lo largo de la historia de Israel en el Antiguo Testamento, leemos acerca de los cananeos, interactuando e incluso viviendo entre los israelitas. Parece que Arauna pudo haber sido uno de los jebuseos restantes que vivían allí, o al menos tenía una era cerca de Jerusalén.
Una era como la que vendía Arauna era una gran superficie abierta y elevada para facilitar la trilla y el aventamiento. En primer lugar, había que romper la cáscara del grano para poder separarlo. Para ello se golpeaba el grano o se utilizaba una especie de trineo, un conjunto de tablas pesadas con material abrasivo (por ejemplo, piedras afiladas) en la parte inferior. Los animales de tiro tiraban del trineo de un lado a otro para separar la dura cáscara del grano. Luego, el grano se lanzaba al aire y el viento se llevaba la cáscara exterior (la paja, ver Salmo 1:4) y el grano, más pesado, volvía a caer al suelo.
El profeta Gad, quién había estado comunicando la voluntad de Dios a David durante todo este suceso, le dijo a David que construyera un altar para el Señor en la era de Arauna. David fue a Arauna y le contó lo que pretendía y ofreció comprar la era. Arauna, en cambio, ofreció donar el sitio, así como los bueyes para la ofrenda y las trilladoras para la madera. Esta oferta es significativa porque estos artículos representan la totalidad del medio de vida de Arauna. Él es muy respetuoso con David, pero habla del "Señor su Dios" (2 Samuel 24:23, NBLA), quizás indicando que Arauna no era un creyente en el Dios de Israel. David rechaza su oferta y explica en el versículo 24: "No, sino que ciertamente por precio te lo compraré, pues no ofreceré al Señor mi Dios holocausto que no me cueste nada. Y David compró la era y los bueyes por cincuenta siclos (570 gramos) de plata" (2 Samuel 24:24, NBLA). David tiene razón: un sacrificio que no nos cuesta nada no es un verdadero sacrificio. Arauna vendió el sitio a David, así como los suministros para la ofrenda, y la plaga se detuvo (versículo 25).
Primera de Crónicas 21 es el pasaje paralelo a 2 Samuel 24, pero no aprendimos nada nuevo acerca de Arauna allí, excepto que también se le llamaba Ornán el jebuseo. Hay una serie de razones por las cuales esto podría ser. Si Arauna era cananeo, no hebreo, su nombre tendría que traducirse o transliterarse al hebreo y esto puede resultar en alguna variación de la ortografía, especialmente porque 2 Samuel y 1 Crónicas fueron escritos varios cientos de años aparte. También es posible que Arauna sea un título en lugar de un nombre propio. Hay bastantes casos en las Escrituras en donde una persona tiene dos nombres o variaciones en la ortografía del mismo nombre. Esto no indica ningún error en el texto, sino la variación normal para esa época y tipo de literatura.
