Respuesta:
Los meunitas eran un antiguo pueblo que probablemente vivía al sur de Judá. Se les menciona un puñado de veces en el Antiguo Testamento, y los detalles históricos exactos sobre ellos siguen estando fuera de nuestro alcance. Para reconstruir los escasos detalles disponibles, los eruditos se ven obligados a hacer conjeturas. Es probable que los meunitas sigan siendo un misterio, a menos que se descubran más pruebas históricas.
Los meunitas se mencionan por primera vez en la Biblia en 1 Crónicas 4:41 (NBLA), cuando algunos meunitas fueron destruidos por descendientes de Simeón en busca de pasto. Se mencionan nuevamente en 2 Crónicas 20:1 (NBLA), aunque esta referencia es discutida debido a un posible error de copia en el Texto Masorético. Suponiendo que esto sea una referencia a los meunitas, ese grupo aparentemente se unió a los moabitas y amonitas en un ataque a Judá durante el reinado del rey Josafat. Sorprendentemente, parecen estar asociados con el monte Seir más adelante en la historia (2 Crónicas 20:10, 22, 23), lo que los ubica al sur de Judá. Más tarde, el rey Uzías luchó contra los meunitas en 2 Crónicas 26:7, obteniendo la victoria gracias a la ayuda de Dios. Finalmente, Esdras 2:50 y Nehemías 7:52 enumeran a los descendientes de Mehunim entre los que regresan del exilio babilónico. Es posible que sus antepasados fueran los meunitas que lucharon contra Judá y que fueron incorporados involuntaria o voluntariamente. Estas referencias bíblicas básicamente describen a un grupo de personas del sur que ocasionalmente entraron en batalla con Judá y tuvieron algunos descendientes entre ellos después del exilio.
Más allá de lo que se deduce de estos pasajes, los académicos han presentado algunas propuestas más sobre este misterioso pueblo, ninguna de las cuales se puede demostrar de manera concluyente. Algunos creen que los meunitas son la misma gente que los de Maón, que se mencionan en Jueces 10:12. Esto es ciertamente posible. Otros creen que los meunitas estaban asociados con la ciudad de Ma'an, debido a similitudes lingüísticas con su nombre y una posible proximidad geográfica. Históricamente, muchos académicos asociaron a los meunitas con los minaeanos, porque la Septuaginta tradujo la palabra hebrea para "meunita" a la palabra griega para "minaeano". Esta conexión es altamente improbable debido a diferencias cronológicas y geográficas. Los minaeanos se convirtieron en una nación importante siglos después de las menciones de los meunitas en la Biblia y en una ubicación completamente diferente, lo que hace improbable cualquier asociación.
En conclusión, se conoce poco hoy en día sobre los meunitas. Chocaron con los israelitas en diferentes momentos de la historia bíblica, con un número desconocido de ellos convirtiéndose en parte de Israel en algún momento. Debido a la escasez de información histórica, las conclusiones sobre los detalles de los meunitas son muy especulativas. Aparentemente, algunos de sus descendientes sirvieron en el templo después del exilio, con la esperanza de que algunos de ellos llegaran a conocer a Dios y lo siguieran.