Pregunta: ¿Qué significa que Dios es el Rey de la gloria?
Respuesta:
La frase Rey de la gloria se encuentra en una serie de versículos en el Salmo 24:
"Alcen, oh puertas, sus cabezas,
álcense, puertas eternas,
Para que entre el Rey de la gloria.
¿Quién es este Rey de la gloria?
El Señor, fuerte y poderoso;
El Señor, poderoso en batalla.
Álcen, oh puertas, sus cabezas,
Álcenlas, puertas eternas,
Para que entre el Rey de la gloria.
¿Quién es este Rey de la gloria?
El Señor de los ejércitos,
Él es el Rey de la gloria" (Salmo 24:7–10 − NBLA).
La palabra hebrea traducida como "gloria" en el Salmo 24 es kabod, que significa "peso", pero se usa en sentido figurado, como en "su argumento tiene peso" o "el contenido de ese libro es pesado". Kabad tiene una connotación de solemnidad y poder. Llamar a Dios el "Rey de la Gloria" significa que él es el rey más imponente, el más poderoso y debe ser tomado en serio.
Usando un tipo de personificación conocida como apóstrofe, el salmista se dirige a las "puertas" y a las "puertas eternas", llamándoles la atención y ordenándoles que "se levanten" o que se eleven para dejar entrar al Rey de la gloria. Por muy majestuosas que sean estas puertas eternas, deben ser aún más majestuosas para admitir una presencia tan gloriosa como la del Señor mismo.
Hay una conexión que se puede hacer entre el Rey de la gloria en el Salmo 24 y la gloria Shejiná en Éxodo 33. Cuando Dios le dio a Moisés instrucciones para la construcción del Arca del Pacto, Él dijo: "yo apareceré en la nube sobre el propiciatorio" (Levítico 16:2). El propiciatorio debía verse como el "trono" glorioso de Dios en la tierra (ver 2 Samuel 6:2; Salmo 80:1; 99:1). Y fue desde el propiciatorio que Dios le habló a Moisés: "de allí me declararé a ti, y hablaré contigo de sobre el propiciatorio, de entre los dos querubines que están sobre el arca del testimonio, todo lo que yo te mandare para los hijos de Israel" (Éxodo 25:22).
El Salmo 24 muestra la llegada del Rey de la gloria en un tiempo de celebración. Dada la relación hebrea de la nube de gloria con el Arca del Pacto, es muy probable que el Salmo 24 se escribiera para conmemorar la entrada del Arca en Jerusalén durante el tiempo de David (2 Samuel 6:12–17) o en el templo durante el tiempo de Salomón (2 Crónicas 5:7). El Rey de la gloria entró por las puertas de Jerusalén y por las puertas del templo con una gran procesión, mientras el Arca del Pacto era llevada a su lugar permanente en el monte Sion.
Jesús es llamado el "Señor de la gloria" en 1 Corintios 2:8. Su entrada en Jerusalén en medio de los gritos de una multitud eufórica (Mateo 21) podría verse como otro cumplimiento del Salmo 24. Jesús es el único "de manos y puro de corazón" que puede ascender al monte del Señor (Salmo 24:3–4). Jesús "recibirá bendición del Señor" (versículo 5 − NBLA). Jesús es el Rey de la gloria, "El Señor, fuerte y poderoso; El Señor, poderoso en batalla" (versículo 8 − NBLA).
