Pregunta: "¿Qué pasará cuando Jesús regrese / vuelva?"
Respuesta:
La segunda venida de Cristo se menciona muchas veces en las Escrituras. En más de 1.500 pasajes del Antiguo Testamento y en uno de cada 25 versículos del Nuevo Testamento se menciona el regreso del Mesías. La gran cantidad de material dedicado a este importante evento destaca lo que Dios dice en Amós 3:7: "Porque no hará nada el Señor, sin que revele su secreto a sus siervos los profetas".
En pocas palabras, el regreso de Cristo trae consigo lo que se conoce como el reino de Dios en las Escrituras: el dominio absoluto de Dios sobre Su creación, que incluye a la humanidad. Con el fin de lograrlo, Jesús presenta dos juicios diferentes, dos resurrecciones diferentes y dos eternidades diferentes.
Cuando Jesús regrese, estará listo para la guerra (Apocalipsis 19:11-16). Las naciones se reunirán para luchar contra Jerusalén (Zacarías 14:2), que es lo que llamamos la batalla del Armagedón. Pero ese será el día en que Jesús regrese: "Y se afirmarán sus pies en aquel día sobre el monte de los Olivos, que está en frente de Jerusalén al oriente; y el monte de los Olivos se partirá por en medio, hacia el oriente y hacia el occidente, haciendo un valle muy grande; y la mitad del monte se apartará hacia el norte, y la otra mitad hacia el sur" (Zacarías 14:4). Será un día extraordinario en la historia del mundo: "Y acontecerá que en ese día no habrá luz clara, ni oscura.
Será un día, el cual es conocido del Señor, que no será ni día ni noche" (Zacarías 14:6-7). Los enemigos de Dios serán derrotados, y el Anticristo y el falso profeta serán "lanzados vivos dentro de un lago de fuego que arde con azufre" (Apocalipsis 19:20). Jesús establecerá Su reino, y " el Señor será rey sobre toda la tierra" (Zacarías 14:9).
Cuando establezca Su reino en la tierra, Jesús primero emitirá un juicio para aquellos que aún están vivos después de la tribulación y que están en la tierra en el momento de la segunda venida. Esto se conoce como el "juicio de las ovejas y los cabritos" o "juicio de las naciones" (Mateo 25:31-46). Los que sobrevivan a este juicio permanecerán en la tierra y disfrutarán de un tiempo de paz y prosperidad con Cristo durante 1.000 años (que se conoce como el milenio; véase Apocalipsis 20:4-6). Los que son declarados culpables en este juicio son condenados y destinados al "fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles" (Mateo 25:41). Satanás es atado y se le prohíbe actuar durante el milenio (Apocalipsis 20:1-3).
Durante este tiempo también habrá una resurrección para todos los creyentes en Dios (Apocalipsis 20:4-6). Estos creyentes resucitados se unirán a los creyentes que estén vivos en el momento de la venida de Cristo y con aquellos que Cristo traiga del cielo, y todos vivirán con Jesús durante Su reinado terrenal de 1.000 años.
Al final del milenio, Satanás será liberado, y habrá una batalla final, que Cristo rápidamente ganará (Apocalipsis 20:7-9). Luego Satanás será enviado definitivamente al lago de fuego. En ese momento se producirá la segunda resurrección y otro juicio. Los incrédulos resucitarán y serán juzgados en lo que se conoce como el juicio del gran trono blanco, y por sus obras serán destinados al lago de fuego (Apocalipsis 20:11-15).
Por lo tanto, el regreso de Jesús anunciará dos eternidades diferentes, una con Dios y otra sin Él. Esta verdad está plasmada en dos versículos del libro de Malaquías: "Porque he aquí, viene el día ardiente como un horno, y todos los soberbios y todos los que hacen maldad serán estopa; aquel día que vendrá los abrasará...no les dejará ni raíz ni rama. Mas a vosotros los que teméis mi nombre, nacerá el Sol de justicia, y en sus alas traerá salvación; y saldréis, y saltaréis como becerros de la manada" (Malaquías 4:1-2).
¿Qué pasará cuando Jesús regrese? Se derrotará el mal, se restaurará la tierra y Dios ganará. Tu respuesta al regreso de Jesús depende de tu relación con Él. Será la mayor devastación en la historia de la humanidad o el cumplimiento de la esperanza bienaventurada (Tito 2:13). La fe en Cristo hace la diferencia. "Pero cuando venga el Hijo del Hombre, ¿hallará fe en la tierra?" (Lucas 18:8).
