Pregunta: ¿Qué significa cuando Dios dijo: "Hagamos al hombre a nuestra imagen" (Génesis 1:26)?
Respuesta:
Génesis 1 detalla el relato de la creación del Dios omnisciente, omnipotente y soberano. Cuando Dios llega a Su acto creativo culminante -la formación de la vida humana-, Sus palabras cambian del impersonal "hágase" a la expresión deliberada e íntima: "Hagamos al hombre a nuestra imagen y semejanza". El plan de Dios para los seres humanos incluía darles responsabilidades sobre la tierra: "y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra" (Génesis 1:26).
Los seres humanos -tanto hombres como mujeres- están hechos a imagen de Dios (Génesis 1:27; 5:1-3; 9:6; Santiago 3:9). "Hagamos a los seres humanos a nuestra imagen, para que sean como nosotros", dice Génesis 1:26 en la NTV. No evolucionamos a partir de otras formas de vida inferiores. Fuimos creados directamente por Dios para representarle en la tierra y tener dominio sobre toda otra creación en Su nombre (Génesis 1:26-28).
Tener la imagen de Dios significa que estamos hechos para parecernos y representar a Dios en la tierra. A algunos cristianos les gusta decir que somos "imagen de Dios". Nuestra semejanza con Dios no es un parecido físico. En cambio, la semejanza con Dios denota nuestra capacidad para gobernar la creación y estar en relación con Dios y con otros seres humanos y para ejercer la razón, la inteligencia, el habla, la conciencia moral, la creatividad, la racionalidad y la capacidad de elección. Desde el principio de los tiempos, Dios ha deseado bendecirnos y disfrutar de una estrecha comunión con nosotros, y por eso nos hizo semejantes a Él.
Jesucristo, el Hijo de Dios, es la imagen preeminente y perfecta de Dios: "Él es el resplandor de Su gloria y la expresión exacta de Su naturaleza" (Hebreos 1:3, NBLA; ver también 2 Corintios 4:4; Colosenses 1:15). Ver a Jesús es ver al Padre (Juan 14:9). Conocer a Cristo es conocer a Dios. Jesucristo nos muestra lo que Dios quiso decir cuando dijo: "Hagamos al hombre a nuestra imagen".
La palabra hebrea original para "Dios" en Génesis 1 es el sustantivo masculino plural Elohim. Dios, nuestro Creador, eligió presentarse a nosotros con un título plural. En Génesis 1:26 -la primera vez en la Biblia que Dios habla de Sí mismo- utiliza los pronombres plurales Nosotros y Nuestro. Este pasaje no es el único en el que Dios se refiere a Sí mismo en plural (ver Génesis 3:22; 11:7; e Isaías 6:8). Encontramos el plural Elohim más de 2.550 veces en la Biblia.
Sabemos por las Escrituras que solo hay un Dios, no hay otro Dios, y Él es uno (Deuteronomio 6:4; Isaías 45:5, 6, 18; Marcos 12:32; Gálatas 3:20; 1 Timoteo 2:5). Entonces, ¿cómo podemos entender la pluralidad de Su nombre Elohim junto con Su declaración: "Hagamos al hombre a Nuestra imagen"?
Los eruditos presentan varias explicaciones posibles:
Algunos creen que en Génesis 1:26 Dios se refiere a Sí mismo e incluye a la asamblea celestial de ángeles, como en Job 1:6; 1 Reyes 22:19-20; y Salmo 89:5. Sin embargo, esta teoría se desmorona porque en ninguna parte de las Escrituras Dios dice que los ángeles fueron hechos a Su imagen o semejanza. Otra hipótesis sugiere que la forma plural se utiliza para transmitir dignidad y esplendor, un recurso lingüístico llamado "plural de majestad". Otros atribuyen el lenguaje plural a una técnica conocida como "plural de deliberación", utilizada cuando un orador consulta consigo mismo, como hace el Señor en Isaías 6:8: "Después oí la voz del Señor, que decía: ¿A quién enviaré, y quién irá por nosotros?"
La convicción de los primeros padres de la iglesia era que la afirmación de Elohim: "Hagamos al hombre a Nuestra imagen", comunica una expresión compleja y unificada de la Trinidad. La doctrina de la Trinidad sostiene que Dios es Uno en tres Personas: Dios Padre; Dios Hijo, Jesucristo, nuestro Salvador; y Dios Espíritu Santo. Aquí, en Génesis 1:26, el "Nosotros" y el "Nuestro" indican a Dios Padre hablando en la plenitud de Su divino poder creador al Hijo y al Espíritu Santo. Una conversación similar entre la Divinidad se ve en Génesis 3:22 (NBLA): "Entonces el Señor Dios dijo: Ahora el hombre ha venido a ser como uno de Nosotros, conociendo ellos el bien y el mal".
Los seres humanos son los únicos creados a imagen y semejanza de Dios, lo que los distingue de todos los demás seres terrenales. Fuimos hechos como Él para que pudiéramos estar en relación con Él-el único y trino Dios.