Respuesta:
El panteísmo cristiano es un intento de relacionar la Biblia con la falsa idea de que todo lo que existe es, en realidad, Dios. Esta es la idea central del panteísmo: que "Dios es todo, y todo es Dios". Sin embargo, la Biblia habla claramente de Dios como algo separado de Su creación. Las referencias al "panteísmo cristiano" son tan auto contradictorias como hablar de "círculos cuadrados". Las dos ideas son inherentemente incompatibles. Como resultado, la mayoría de los intentos de interpretar la Escritura para apoyar el panteísmo suponen descartar esa misma Escritura de alguna manera. Esto ocurre ya sea cuestionando la exactitud de la Biblia o sacando los versículos completamente de contexto.
El panteísmo declara que sólo Dios existe; todo es Dios. Esto contradice flagrantemente muchos conceptos centrales que se presentan en la Biblia. Dios dice explícitamente que Él no es lo mismo que el hombre (Números 23:19), que el universo es una cosa creada (Génesis 1:1), que el hombre está hecho a Su imagen (Génesis 1:27), etc. Las Escrituras describen al hombre y a Dios hablando entre sí (Génesis 3:9-10; Éxodo 3:4-5), a Dios juzgando al hombre (Isaías 2:4; 33:22) y a Dios separándose de ciertos seres (Apocalipsis 20:12-15). Todo el concepto de oración implica que hay un "otro" que escucha la oración (Mateo 6:9). Por eso los verdaderos panteístas no oran, sino que meditan, ya que el panteísmo niega que haya un "otro" con el que comunicarse.
Los que intentan defender el panteísmo cristiano sacan de contexto algunos versículos de la Biblia. Casi todos esos errores se centran en la idea de que el Espíritu de Dios habita en el hombre. Por ejemplo, Gálatas 2:20 habla de que Cristo vive "en" nosotros. Primera de Corintios 3:16-17 se refiere al cuerpo del hombre como "templo de Dios". Primera de Juan 3:24 menciona que el Espíritu "habita" en los creyentes. Estos versículos, según el panteísta, muestran que Dios y el hombre son uno y lo mismo.
Sin embargo, tanto los contextos específicos de estos versículos como el contexto general de la Biblia muestran que este punto de vista es falso. La morada del Espíritu Santo no es una oscura metáfora poética del panteísmo. Si la Escritura pretendiera enseñar que "todo es Dios, y Dios es todo", no haría referencia a conceptos como la salvación, el pecado, la oración o el juicio, todos los cuales implican una diferencia absoluta y objetiva entre dos cosas no idénticas.
La Escritura es clara: Dios no es lo mismo que Su creación. Ciertamente no es lo mismo que el hombre. Oscuro o no, el panteísmo cristiano es, en definitiva, otro ejemplo de mala interpretación de la Biblia y de una lógica incluso peor.