Pregunta
¿Quiénes son el Espíritu y la Esposa en Apocalipsis 22:17?
Respuesta
Apocalipsis 22:17 proclama: "El Espíritu y la esposa dicen: "Ven". Y el que oye, diga: "Ven". Y el que tiene sed, venga; y el que desee, que tome gratuitamente del agua de la vida" (NBLA). En este versículo, tanto el Espíritu como la Esposa extienden una invitación a "Ven". Para comprender su invitación, exploraremos quiénes son el Espíritu y la Esposa, su papel en el plan redentor de Dios y el significado de su llamado unificado.
El "Espíritu" de Apocalipsis 22:17 es el Espíritu Santo, la tercera persona de la Trinidad. El Espíritu Santo desempeña un papel importante en la vida individual de los creyentes y en la vida comunitaria de la Iglesia. En Juan 14:26, Jesús dice: "Pero el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en Mi nombre, Él les enseñará todas las cosas, y les recordará todo lo que les he dicho" (NBLA). Aquí se describe al Espíritu como un maestro que recuerda a los creyentes las enseñanzas de Cristo.
La mención del Espíritu Santo en Apocalipsis 22:17 se refiere a que atrae a las personas hacia Cristo. El Espíritu Santo obra en el corazón de las personas, las convence de pecado y las conduce al arrepentimiento y a la fe: "Y cuando Él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio" (Juan 16:8, NBLA). Esta obra del Espíritu Santo es esencial para que los pecadores reconozcan su necesidad de salvación en Cristo y respondan positivamente al llamado del Evangelio.
El Espíritu Santo también capacita a los creyentes para el servicio del Evangelio. En Hechos 1:8, Jesús dice a Sus discípulos: "pero recibirán poder cuando el Espíritu Santo venga sobre ustedes; y serán Mis testigos en Jerusalén, en toda Judea y Samaria, y hasta los confines de la tierra" (NBLA). El poder del Espíritu Santo permite a los creyentes cumplir la Gran Comisión de Mateo 28:19-20. En Apocalipsis 22:17, la invitación del Espíritu de "Ven" es una extensión de Su función de dar poder y guiar. Todos los que tienen sed espiritual son invitados a recibir el agua vivificante de la salvación (cf. Juan 7:37).
La Esposa de Apocalipsis 22:17 representa a la Iglesia, los santos llamados de Dios. En el Nuevo Testamento, se describe a la Iglesia como la "Esposa de Cristo", que simboliza una relación personal, íntima y de pacto con Cristo. Efesios 5:25-27 ilustra la relación entre Cristo y Su Iglesia, diciendo: "Maridos, amen a sus mujeres, así como Cristo amó a la iglesia y se dio Él mismo por ella, para santificarla, habiéndola purificado por el lavamiento del agua con la palabra, a fin de presentársela a sí mismo, una iglesia en toda su gloria, sin que tenga mancha ni arruga ni cosa semejante, sino que fuera santa e inmaculada" (NBLA).
Como Esposa de Cristo, los creyentes están llamados a una devoción incondicional a Cristo. Parte de lo que significa dedicarse a Cristo es proclamar el Evangelio e invitar a otros a unirse a la familia de la fe. El papel de la Esposa en Apocalipsis 22:17, pues, es unirse al Espíritu para decir: "Ven". El esfuerzo cooperativo entre el Espíritu Santo y la Esposa significa la importancia de que compartamos el Evangelio con los no creyentes.
La invitación unificada del Espíritu y la Esposa refleja el corazón de Dios, que desea que todas las personas vengan al arrepentimiento y encuentren la vida eterna en Cristo (2 Pedro 3:9). Su invitación de "Ven" es un llamado a todo aquel que reconozca su necesidad de renovación espiritual y esté dispuesto a aceptar el don de la vida eterna. Tanto el Espíritu como la Esposa hacen hincapié en la necesidad y la accesibilidad de la salvación mediante la fe en Cristo.
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¿Quiénes son el Espíritu y la Esposa en Apocalipsis 22:17?
