Pregunta
¿Qué es una oración de invocación?
Respuesta
Una oración de invocación es una solicitud de presencia espiritual y bendición de Dios en una ceremonia o evento. Invocar es llamar seriamente, así que una "invocación" en el contexto de la oración es un llamado serio e intencional a Dios. Es común que las oraciones de invocación se ofrezcan públicamente al comienzo de un servicio de iglesia u otra reunión cristiana. Tales oraciones piden a Dios que otorgue su presencia en la adoración, que bendiga el servicio o la actividad y que escuche las oraciones de petición ofrecidas a Él.
Los Salmos están llenos de oraciones de invocación. Muchas veces, David oraba para que Dios estuviera presente con él y escuchara sus oraciones, particularmente en tiempos de problemas y persecución. Cuando David estaba en peligro de ser traicionado al rey Saúl por sus enemigos, invocó la atención de Dios a sus oraciones: "Oh Dios, oye mi oración; escucha las razones de mi boca" (Salmos 54:2). Además, en tiempos de gran aflicción, David invocó la presencia de Dios: "Escucha, oh Dios, mi oración, y no te escondas de mi súplica" (Salmos 55:1). "Oye, oh Dios, mi clamor; a mi oración atiende" (Salmos 61:1).
Las oraciones de invocación de David también suplicaban a Dios que lo ayudara en tiempos de problemas. En una oración que incluye elementos de imprecación, David invocó la presencia y ayuda de Dios contra sus enemigos en Salmos 71:12-13: "Oh Dios, no te alejes de mí; Dios mío, acude pronto en mi socorro. Sean avergonzados, perezcan los adversarios de mi alma; Sean cubiertos de vergüenza y de confusión los que mi mal buscan". Salmos 79:9 invoca la ayuda de Dios para la gloria de su nombre: “Ayúdanos, oh Dios de nuestra salvación, por la gloria de tu nombre; Y líbranos, y perdona nuestros pecados por amor de tu nombre”. David también ofreció una invocación para la bendición de Dios en un canto de alabanza en Salmos 67:1: “Dios tenga misericordia de nosotros, y nos bendiga; Haga resplandecer su rostro sobre nosotros”.
En lo que se conoce como la oración del Señor (Mateo 6: 9-15), Jesús comienza con una invocación que 1) identifica a Dios y nuestra relación con Él: "Padre nuestro que estás en los cielos"; 2) atribuye gloria y honor a Dios: "Santificado sea tu nombre"; y 3) alinea al solicitante con la voluntad de Dios: "Venga tu reino. Hágase tu voluntad, así en la tierra como en el cielo." Como cristianos, tenemos acceso al trono de Dios a través de la fe en Cristo (Efesios 3:12). Todas nuestras oraciones de invocación deben contener los elementos de humildad, alabanza y reverencia mientras nos acercamos, en el nombre de Jesús, a aquel cuya bendición buscamos.
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¿Qué es una oración de invocación?
