Pregunta
¿Qué significa "perfeccionar la santidad en el temor de Dios" (2 Corintios 7:1)?
Respuesta
Segunda de Corintios 7:1 (NBLA) dice: "Por tanto, amados, teniendo estas promesas, limpiémonos de toda inmundicia de la carne y del espíritu, perfeccionando la santidad en el temor de Dios". Para limpiarse de la inmundicia espiritual y moral, los creyentes deben "perfeccionar la santidad" en obediencia reverente a Dios. Esto no significa que vayamos a alcanzar un estado de perfección sin pecado en esta vida, sino que, a medida que obedezcamos a Dios, nos iremos transformando cada vez más en la imagen de Cristo. La NTV dice: "Y procuremos alcanzar una completa santidad porque tememos a Dios".
En el capítulo anterior, Pablo habla del deseo de Dios de habitar entre Su pueblo y ser su Dios (2 Corintios 6:16). Más que eso, Dios prometió: "Yo seré un padre para ustedes, y ustedes serán para Mí hijos e hijas" (versículo 18, NBLA). Estas son las promesas que Pablo menciona en 2 Corintios 7:1 y que nos motivan a separarnos del mundo y a "perfeccionar la santidad en el temor de Dios". Puesto que Dios ha establecido una relación entre nosotros y Él, debemos ser santos en todos los aspectos de la vida.
La santidad es el atributo de ser apartado para el servicio de Dios, reflejando Su carácter moral perfecto. En Levítico 11:44 (NBLA), Dios dice: "Yo soy el Señor su Dios. Por tanto, conságrense y sean santos, porque Yo soy santo". Perfeccionar la santidad en el temor de Dios significa esforzarse por reflejar el carácter de Dios en la propia vida. No es un proceso instantáneo, sino que implica una santificación continua mediante la obra del Espíritu Santo.
La santidad afecta tanto a nuestros pensamientos internos como a nuestras acciones externas. Por eso Pablo dice que debemos "limpiarnos de la inmundicia de la carne y del espíritu". Esto corresponde a lo que dice en Romanos 12:1: "Por tanto, hermanos, les ruego por las misericordias de Dios que presenten sus cuerpos como sacrificio vivo y santo, aceptable a Dios, que es el culto racional de ustedes" (NBLA). Perfeccionar la santidad en el temor de Dios requiere que alineemos nuestros pensamientos, deseos y acciones con la voluntad de Dios (Romanos 12:2).
El temor de Dios es obediencia reverente a Él, reconociendo Su santidad, majestad y soberanía. Proverbios 9:10 afirma: "El principio de la sabiduría es el temor del Señor, y el conocimiento del Santo es inteligencia" (NBLA). Perfeccionar la santidad en el temor de Dios está arraigado en un profundo respeto por quién es Dios. No se trata de sentir terror ante Dios, sino de honrarle con nuestro cuerpo y nuestro espíritu.
El temor reverencial a Dios debe motivarnos para evitar el pecado y buscar Su justicia. Filipenses 2:12-13 exhorta a los creyentes a ocuparse "en su salvación con temor y temblor. Porque Dios es quien obra en ustedes tanto el querer como el hacer, para Su buena intención" (NBLA). Perfeccionar la santidad en el temor de Dios significa someternos humildemente a la obra santificadora de Dios en nuestras vidas, esforzándonos por vivir de un modo que le agrade. Otra motivación es saber que Jesús volverá: "Y todo aquel que tiene esta esperanza en él, se purifica a sí mismo, así como él es puro" (1 Juan 3:3).
Hay varias formas de perfeccionar la santidad en el temor de Dios. Una es pedir humildemente la ayuda de Dios: "Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón; Pruébame y conoce mis pensamientos; Y ve si hay en mí camino de perversidad, Y guíame en el camino eterno" (Salmo 139:23-24). El Señor nos ayudará a identificar las áreas que necesitan ser purificadas.
Otra forma de perfeccionar la santidad en el temor de Dios es buscar activamente una vida de integridad y comportamiento moral. Miqueas 6:8 dice: "Él te ha declarado, oh hombre, lo que es bueno. ¿Y qué es lo que demanda el Señor de ti, Sino solo practicar la justicia, amar la misericordia, Y andar humildemente con tu Dios?" (NBLA). Perfeccionar la santidad en el temor de Dios significa que nos comprometemos con la santidad de Dios, demostrando justicia, misericordia y humildad.
Segunda de Corintios 7:1 llama a los creyentes a perfeccionar o completar la santidad en el temor de Dios. Esta búsqueda de por vida es una respuesta a las promesas de Dios. Si comprendemos la naturaleza de la santidad, nos sometemos a Dios en obediencia reverencial y crecemos en la gracia y el conocimiento de Cristo, podremos reflejar mejor la santidad de Dios en nuestras vidas.
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¿Qué significa "perfeccionar la santidad en el temor de Dios" (2 Corintios 7:1)?
