Pregunta
¿Qué es el evangelio?
Respuesta
La palabra evangelio significa literalmente “buenas nuevas” y aparece 93 veces en la Biblia, exclusivamente en el Nuevo Testamento. En griego, es la palabra euaggelion, de la cual obtenemos nuestras palabras evangelista, evangelio y evangélico. El evangelio es, en términos generales, toda la Escritura; de manera más específica, el evangelio es la buena noticia acerca de Cristo y el camino hacia la salvación.
La clave para entender el evangelio es conocer por qué es una buena noticia. Para hacer eso, debemos comenzar con la mala noticia. La Ley del Antiguo Testamento fue dada a Israel durante el tiempo de Moisés (Deuteronomio 5:1). La Ley puede ser pensada como una regla de medición, y el pecado es cualquier cosa que se queda corta de la “perfección” según ese estándar. El requerimiento justo de la Ley es tan riguroso que ningún ser humano podría seguirlo a la perfección, ni en letra ni en espíritu. A pesar de nuestra “bondad” o “maldad” relativa entre nosotros, todos estamos en el mismo barco espiritual: hemos pecado, y el castigo por el pecado es la muerte, es decir, la separación de Dios, la fuente de vida (Romanos 3:23). Para que podamos ir al cielo, morada de Dios y el reino de la vida y la luz, el pecado debe ser de alguna manera eliminado o pagado. La Ley establece el hecho de que la limpieza del pecado solo puede ocurrir a través del sacrificio sangriento de una vida inocente (Hebreos 9:22).
El evangelio implica la muerte de Jesús en la cruz como la ofrenda por el pecado para cumplir el requerimiento justo de la Ley (Romanos 8:3-4; Hebreos 10:5-10). Bajo la Ley, se ofrecieron sacrificios de animales año tras año como un recordatorio del pecado y un símbolo del sacrificio venidero de Cristo (Hebreos 10:3-4). Cuando Cristo se ofreció en el Calvario, ese símbolo se convirtió en una realidad para todos los que creerían (Hebreos 10:11-18). La obra de la expiación está terminada ahora, y eso es una buena noticia.
El evangelio también implica la resurrección de Jesús al tercer día. “El cual fue entregado por nuestras transgresiones, y resucitado para nuestra justificación” (Romanos 4:25). El hecho de que Jesús venció al pecado y a la muerte (la pena del pecado) es, de hecho, una buena noticia. El hecho de que Él ofrece compartir esa victoria con nosotros es la mejor noticia de todas (Juan 14:19).
Los elementos del evangelio se declaran claramente en 1 Corintios 15:3-6, un pasaje clave acerca de las buenas noticias de Dios: “Porque primeramente os he enseñado lo que asimismo recibí: Que Cristo murió por nuestros pecados, conforme a las Escrituras; y que fue sepultado, y que resucitó al tercer día, conforme a las Escrituras; y que apareció a Cefas, y después a los doce. Después apareció a más de quinientos hermanos a la vez, de los cuales muchos viven aún, y otros ya duermen”. Nótese, primero, que Pablo “recibió” el evangelio y luego lo “pasó”; este es un mensaje divino, no una invención humana. Segundo, el evangelio es “de primera importancia”. Dondequiera que los apóstoles iban, predicaban la crucifixión y resurrección de Cristo. Tercero, el mensaje del evangelio viene acompañado de pruebas: Cristo murió por nuestros pecados (demostrado por su sepultura), y resucitó al tercer día (demostrado por los testigos oculares). Cuarto, todo esto fue hecho “según las Escrituras”; el tema de toda la Biblia es la salvación de la humanidad a través de Cristo. La Biblia es el evangelio.
“Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y también al griego” (Romanos 1:16). El evangelio es un mensaje audaz, y no nos avergonzamos de proclamarlo. Es un mensaje poderoso, porque es la buena noticia de Dios. Es un mensaje salvador, la única cosa que puede reformar verdaderamente el corazón humano. Es un mensaje universal, tanto para judíos como para gentiles. Y el evangelio se recibe por fe; la salvación es el don de Dios (Efesios 2:8-9).
El evangelio es la buena noticia de que Dios ama tanto al mundo que dio a su único Hijo para morir por nuestro pecado (Juan 3:16). El evangelio es una buena noticia porque nuestra salvación y vida eterna y hogar en el cielo están garantizados a través de Cristo (Juan 14:1-4). “Bendito el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que según su grande misericordia nos hizo renacer para una esperanza viva, por la resurrección de Jesucristo de los muertos, para una herencia incorruptible, incontaminada e inmarcesible, reservada en los cielos para vosotros” (1 Pedro 1:3-4).
El evangelio es una buena noticia cuando entendemos que no nos ganamos (y no podemos ganarnos) nuestra salvación; la obra de redención y justificación está completa, habiéndose terminado en la cruz (Juan 19:30). Jesús es la propiciación por nuestros pecados (1 Juan 2:2). El evangelio es la buena noticia de que nosotros, que una vez fuimos enemigos de Dios, hemos sido reconciliados por la sangre de Cristo y adoptados en la familia de Dios (Romanos 5:10; Juan 1:12). “Mirad cuál amor nos ha dado el Padre, para que seamos llamados hijos de Dios; por esto el mundo no nos conoce, porque no le conoció a él” (1 Juan 3:1). El evangelio es la buena noticia de que “Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús” (Romanos 8:1).
Rechazar el evangelio es aceptar la mala noticia. La condenación delante de Dios es el resultado de la falta de fe en el Hijo de Dios, la única provisión de Dios para la salvación. “Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él. El que en él cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios” (Juan 3:17-18). ¡Dios ha dado buenas noticias a un mundo condenado: el Evangelio de Jesucristo!
English
¿Qué es el evangelio?