Pregunta
¿Quién/qué es Baphomet?
Respuesta
Baphomet es el nombre de un falso dios asociado en el pasado con los Caballeros Templarios y en la actualidad con el satanismo y el ocultismo. Las representaciones modernas de Baphomet lo muestran con una cabeza de cabra sobre un cuerpo humano (con rasgos tanto masculinos como femeninos); entre los cuernos de la cabra hay una antorcha, y la imagen a menudo incluye un pentagrama. El origen del culto a Baphomet es objeto de mucho debate. Incluso los orígenes de la palabra "Baphomet" son desconocidos. Algunos creen que es una corrupción francesa de "Mahomet" (Mahoma). Otros creen que es un código de la Cábala que significa "el padre del templo de la paz de todos los hombres", o que proviene de la palabra árabe para "el padre del entendimiento". También se ha sugerido que es un cifrado Atbash judío aplicado a Sofía, la diosa griega de la sabiduría.
Independientemente de su origen, Baphomet aparentemente llegó a Europa con los Caballeros Templarios tras su regreso de las Cruzadas. A principios del siglo XIV, los inquisidores del rey Felipe IV acusaron a los Templarios de haber descubierto y adorado al dios extranjero Baphomet durante la guerra. Algunos caballeros confesaron, pero solo bajo tortura, y los relatos sobre la forma del ídolo variaban: tenía un rostro, tenía tres rostros, era solo un cráneo humano, parecía un gato. Adorar la imagen de un animal o un hombre que se presumía que era Mahoma es inconsistente con el Islam, pero sí coincidiría con las creencias erróneas sobre el Islam que circulaban en Francia en ese momento. Además, no hay mención de Baphomet en la literatura templaria. También se han intentado hacer conexiones entre Baphomet y la masonería, pero estas acusaciones son inconclusas o completamente falsas.
La representación moderna de Baphomet se originó en 1861 con el ocultista francés Eliphas Levi, quien dibujó una imagen de la "Cabra Sabática o Baphomet de Mendes" en su libro "Dogma y Ritual de la Alta Magia". La imagen de Levi muestra una figura hermafrodita, sentada con las piernas cruzadas, con cabeza de cabra. La figura combina varios opuestos: un brazo masculino y otro femenino, pechos femeninos pero con un símbolo fálico de caduceo, un brazo apuntando hacia arriba hacia una luna blanca y otro hacia abajo hacia una luna oscura. Los contrastes debían simbolizar fuerzas opuestas en el universo que debían equilibrarse para alcanzar la verdadera iluminación. Levi intentó combinar varios íconos: la figura templaria, Satanás, el dios de la fertilidad con forma de cabra de Mendes, Egipto, y la cabra que, supuestamente, las brujas adoraban en sus Sabbats o festividades paganas. La apariencia de cabra de Baphomet también se asemeja a Pan, Puck y al dios celta Cernunnos. Levi afirmó que el nombre Baphomet provenía de leer al revés la abreviatura latina de "el padre del templo de la paz universal entre los hombres".
En 1897, Stanislas de Guaita adaptó la cabeza de la Cabra Sabática de Levi para encajar dentro de un pentagrama. La versión de Baphomet de De Guaita incluía una estrella de cinco puntas invertida, rodeada por dos círculos. Entre los círculos, se encuentran cinco letras hebreas, una en cada punto de la estrella, que forman la palabra hebrea para "Leviatán". En los brazos superiores de la estrella aparece el nombre Samael, el ángel de la muerte en la tradición talmúdica; y en los inferiores, Lilith, un demonio femenino que, según las creencias paganas, fue la primera esposa de Adán. En 1969, Anton LaVey adoptó el pentagrama de la cabra para su Iglesia de Satán e identificó definitivamente a Baphomet con el satanismo.
El ocultista y mago Aleister Crowley, a finales del siglo XIX y principios del XX, interpretó a Baphomet como "el andrógino divino". Crowley rechazó los conceptos del Dios bíblico y de Satanás, y siguió la enseñanza gnóstica de que Satanás trajo sabiduría a la humanidad, repitiendo la antigua mentira de la serpiente en el Edén. Para Crowley, Baphomet representaba vida, amor y luz. Con la adición del signo zodiacal de Capricornio (la cabra), se le agregó el concepto de libertad.
El mito de Baphomet ha crecido en los últimos siglos a través del simbolismo ocultista y la numerología. Los cristianos deben evitar claramente el uso de Baphomet, ya que las ideas que representa son abiertamente antibíblicas. Solo el Señor Dios da sabiduría (Proverbios 2:6), y buscar sabiduría o iluminación en una fuente distinta de Dios es un engaño: "Los terafines hablan iniquidad, y los adivinos ven visiones mentirosas, y cuentan sueños falsos" (Zacarías 10:2, NBLA). No debemos tener nada que ver con Baphomet ni con otros íconos abiertamente ocultistas. Como Josué les dijo a los israelitas al heredar la tierra de Canaán: "No os mezcléis con estas naciones que han quedado con vosotros, ni hagáis mención ni juréis por el nombre de sus dioses, ni los sirváis, ni os inclinéis a ellos" (Josué 23:7).
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