Pregunta
¿Qué es la Era de la Gracia?
Respuesta
La Era de la Gracia, también conocida como la Dispensación de la Gracia o la Edad de la Iglesia, es la sexta dispensación divinamente asignada de la historia mundial, según el dispensacionalismo. El dispensacionalismo es un sistema que los teólogos utilizan para dividir y categorizar los acontecimientos históricos en la Biblia. La mayoría está de acuerdo en que hay siete dispensaciones, aunque algunos creen que hay nueve o tres. La Era de la Gracia es la dispensación que está ocurriendo en este momento en la historia. Comenzó con el Día de Pentecostés (Hechos 2) y es posible gracias a la muerte sacrificial de Jesús en la cruz, su resurrección y su ascensión: "Porque la gracia de Dios se ha manifestado para salvación a todos los hombres" (Tito 2:11).
La salvación siempre ha sido por la gracia de Dios, recibida por fe (Génesis 15:6). En la Dispensación de la Ley, Dios exigió a su pueblo seguir la Ley de Moisés y ofrecer sacrificios por su pecado, sacrificios que apuntaban hacia la provisión de la gracia del Cordero de Dios (Juan 1:29). "Porque la ley por medio de Moisés fue dada, pero la gracia y la verdad vinieron por Jesucristo" (Juan 1:17). Ahora, durante la Era de la Gracia, "no estamos bajo la ley, sino bajo la gracia" (Romanos 6:15). La Ley ha sido cumplida (Mateo 5:17), y la gracia de Dios en Cristo es evidente para todos. Todo lo que se requiere para la salvación es confiar en Jesucristo (Hechos 16:31). Él ha hecho todo lo necesario para la salvación (Efesios 2:8-9).
El término "Era de la Gracia" podría ser engañoso para algunos, no se pretende implicar que las personas en el Antiguo Testamento, antes de la muerte y resurrección de Jesús, fueron negadas de la gracia de Dios. Todavía tenían que confiar en el Señor, una confianza que mostraban al ofrecer los sacrificios. El adorador del Antiguo Testamento, al sacrificar un animal, estaba diciendo: "Confío en que Dios me salvará a pesar de que soy pecador". Los cristianos hoy en día toman el mismo enfoque, espiritualmente, pero la práctica es diferente. En lugar de ofrecer sacrificios repetidos por los pecados, confiamos en el sacrificio único de Cristo (Hebreos 10:1-10).
La gracia de Dios ha estado disponible durante todas las dispensaciones (Salmos 116:5). En el presente, esta Era de la Gracia, nuestro Señor ha ordenado que el evangelio sea llevado a cada rincón del globo, porque Él "desea que todos los hombres sean salvos y lleguen al conocimiento de la verdad" (1 Timoteo 2:4; cf. 2 Pedro 3:9). Su gracia se ofrece a todos.
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¿Qué es la Era de la Gracia?