Pregunta
¿Quién era Joseph Franklin Rutherford?
Respuesta
Joseph Franklin Rutherford (noviembre de 1869 - enero de 1942), también conocido como "Juez" Rutherford, se convirtió en el segundo presidente de la Sociedad de Biblias y Tratados de la Torre del Vigía, hoy conocida como los Testigos de Jehová, poco después de la muerte del fundador de la secta, Charles Taze Russell. Conocido por su personalidad enérgica y sus habilidades oratorias, Rutherford, originalmente el principal representante legal de la organización, asumió el liderazgo de la Sociedad de la Torre del Vigía desde 1917 hasta su muerte a los 72 años.
Con sede en Brooklyn, la Sociedad de Biblias y Tratados de la Torre del Vigía es un culto pseudo-cristiano conocido por su proselitismo puerta a puerta y su larga historia de profecías fallidas. La doctrina de la Torre del Vigía niega la naturaleza trina de Dios, la divinidad del Señor Jesús y Su resurrección corporal, así como la naturaleza personal del Espíritu Santo. La organización también promueve una salvación basada en obras.
Millones que ahora viven nunca morirán
Al igual que su predecesor, Russell, Joseph Rutherford hizo muchas predicciones sobre el fin de los tiempos. Una charla pública titulada "El mundo ha terminado; millones que ahora viven pueden nunca morir" fue presentada por primera vez en Los Ángeles en 1918. Un libro posterior, Millones que ahora viven nunca morirán, fue publicado por la Torre del Vigía en 1920. A los Testigos de Jehová fieles que apoyaban la obra de la organización se les prometía salud, prosperidad y vida eterna en la Nueva Tierra.
Beth Sarim
En su libro, Joseph Rutherford predijo que Abraham, Isaac, Jacob y otros patriarcas del Antiguo Testamento resucitarían en 1925 para establecer un gobierno teocrático mundial. Para alojar a estos pilares de la fe, se construyó una mansión de diez habitaciones en estilo español, llamada Beth Sarim (Casa de los Príncipes), en Kensington, un vecindario de San Diego. Por supuesto, 1925 pasó sin que ocurriera la resurrección prometida, por lo que Rutherford hizo uso personal de la mansión y de un Cadillac amarillo de dieciséis cilindros, que había sido destinado al transporte de los patriarcas resucitados.
En El Nuevo Mundo, publicado por la Torre del Vigía en 1942, Beth Sarim fue elogiada como un monumento a la fidelidad de los Testigos de Jehová. Rutherford seguía creyendo que la mansión de San Diego sería la sede del nuevo gobierno mundial. Una publicación posterior de la Torre del Vigía, Proclamadores del Reino de Dios (1993), omitió la mención de los patriarcas del Antiguo Testamento y afirmó que Beth Sarim había sido construida como un hogar de descanso para Rutherford, quien sufría problemas pulmonares.
Cambios bajo Rutherford
Se podría argumentar que las políticas organizacionales y doctrinales de Joseph Rutherford han tenido más influencia que las del fundador de la secta, Charles Taze Russell. Durante el mandato de Rutherford, que duró 25 años, se publicaron más de veinte libros bajo su nombre. Además:
- Se distribuyeron 400 millones de copias de sus libros y folletos
- La organización adoptó el nombre de Testigos de Jehová
- Los lugares de reunión pasaron a llamarse Salones del Reino
- Se prohibieron las celebraciones de cumpleaños y festividades
- Se prohibió a los miembros servir en el ejército, saludar la bandera y recitar el Juramento a la Bandera
- Se exigió que todos los miembros participaran en la predicación puerta a puerta y en la distribución de literatura, además de presentar informes escritos
- Se iniciaron programas de capacitación semanales
- Se proclamó que 1914 fue el año del regreso invisible de Cristo a la Tierra
- Se enseñó que Jesús murió en un madero de tormento en lugar de una cruz, lo que llevó a los Testigos de Jehová a considerar la cruz como un símbolo idólatra
La última profecía de Rutherford
Sin dejarse desanimar por su falsa profecía sobre 1925, Rutherford hizo otra predicción sobre el fin de los tiempos. En 1941, mientras Estados Unidos se preparaba para la guerra, anunció que la Batalla de Armagedón estaba a solo meses de distancia: Jehová destruiría todos los gobiernos terrenales y establecería Su reino en la Tierra. Poco después, Joseph Franklin Rutherford murió, y su última profecía sigue sin cumplirse.
Conclusión
Como la mayoría de los líderes de cultos, Joseph Franklin Rutherford fue una personalidad carismática que creía ser el único portador de las verdades divinas. Durante su mandato como presidente de los Testigos de Jehová, Rutherford movilizó a sus seguidores con predicciones extravagantes, una constante propaganda religiosa y políticas dictatoriales. A diferencia del apóstol Pablo, quien elogió a los nobles creyentes de Berea por examinar sus enseñanzas a la luz de las Escrituras (Hechos 17:11), líderes de cultos como Joseph Franklin Rutherford exigen obediencia ciega y lealtad sin cuestionamientos. Engañan a multitudes con falsos cristos y falsos mensajes del evangelio.
El apóstol Pablo advirtió: "Si alguien enseña una doctrina diferente y no se conforma a las sanas palabras, las de nuestro Señor Jesucristo, y a la doctrina que es conforme a la piedad, está envanecido y nada entiende, sino que tiene un interés corrompido en discusiones y contiendas de palabras, de las cuales nacen envidias, pleitos, blasfemias, malas sospechas, y constantes rencillas entre hombres de mente depravada, que están privados de la verdad, que suponen que la piedad es un medio de ganancia" (1 Timoteo 6:3-5, NBLA).
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