Pregunta
¿Qué dice la Biblia sobre el arte?
Respuesta
El arte se menciona por primera vez en la Biblia en Éxodo 31. Dios le ordena a Moisés que construya una tienda para el arca del pacto, y Dios nombra a varios artesanos que ha elegido para que hagan "diseños artísticos" que embellezcan la tienda. Dios dice: "Y he puesto sabiduría en el ánimo de todo sabio de corazón". En este texto aprendemos dos cosas sobre lo que Dios piensa del arte: Le gusta, y Él es quien lo origina. Dios quiere que los seres humanos creen cosas bellas, y la habilidad de ellos para hacerlo viene de Él.
Más adelante, en 1 Reyes 6, encontramos a Salomón construyendo un templo para el Señor. En el versículo 4, se hicieron "ventanales con celosías" para la casa. Esto refuerza el hecho de que Dios desea la belleza y le gusta estar rodeado de ella. Si Salomón no creyera que Dios es glorificado con la belleza, no se habría tomado la molestia de crear ventanales con "celosías". Nuevamente, en Cantar de los Cantares, la belleza de la novia se compara con "la obra maestra de un experto joyero" (Cantar de los Cantares 7:1). Dios es el creador; Él es el artista cuyas manos crean la belleza. Por eso, toda la belleza que creamos glorifica a Dios, nuestro creador.
Sin embargo, hay que definir la belleza. El arte que se crea para escandalizar u horrorizar, o para exaltar o provocar el pecado (violencia, lujuria, codicia) no se puede llamar "bello". Sigue siendo "arte", pero no un arte que glorifique a Dios. Usando Éxodo 31:3 como ejemplo, el arte que glorifica a Dios tiene que mostrar "sabiduría, ...inteligencia, ...ciencia". El arte que refleja la obra de Dios es creativo, inteligente y bien hecho. Será valioso.
Dios nunca pondrá en el corazón de un artista la idea de hacer cosas que provoquen el pecado en los demás (Marcos 9:42). Él no llevará a una persona a crear algo que contradiga Su naturaleza. Puede que los artesanos que crean ídolos sean hábiles (Isaías 40:19), pero están usando su habilidad para pervertir la gloria de Dios, en lugar de honrarla. Pero esto no quiere decir que todo el arte tenga que ser como la Capilla Sixtina, o que sólo puede representar temas bíblicos como Jesús en la cruz o los discípulos en una barca. Dios habita en "perfección de hermosura" (Salmo 50:2), y Su santidad es hermosa (1 Crónicas 16:29 y Salmo 29:2). El objetivo del artista al crear arte que glorifique a Dios debe ser elevar el alma del hombre hacia el cielo e iluminar de nuevas maneras la compleja belleza de la santidad, el poder y la gracia de Dios.
Existen literalmente millones de formas en que los artistas pueden representar la gloria de Dios. La creatividad y la habilidad que Dios ha puesto en los corazones, las cabezas y las manos de los artistas los guiará para que puedan crear arte que nos ayude a vencer la maldad y la contaminación de este mundo. Independientemente del medio que usen, pintura, lápiz, textiles, mármol, metal, teatro, música, etc., los artistas tienen una misión en común y son una parte especial y valiosa en el Reino de Dios.
English
¿Qué dice la Biblia sobre el arte?