Pregunta
¿Qué es la familia de la fe que se menciona en Gálatas 6:10?
Respuesta
La estructura social y religiosa básica de la vida antigua giraba en torno al hogar, que era mucho más amplio que la unidad familiar actual. En tiempos del Nuevo Testamento, tanto los hogares judíos como los gentiles incluían no solo a los miembros de la familia inmediata, sino también a una amplia gama de parientes, grupos familiares extensos y afiliaciones de parentesco. Pablo denominó a la comunidad de la iglesia cristiana primitiva la "familia de la fe" (Gálatas 6:10).
Los creyentes entienden que la familia de la fe está formada por aquellos que comparten la misma fe, o "una fe igualmente preciosa que la nuestra" (2 Pedro 1:1). Son hermanos y hermanas en Cristo, miembros de la familia de Dios. El apóstol Pablo identificó la "familia de Dios" como "la iglesia del Dios viviente, columna y baluarte de la verdad" (1 Timoteo 3:15). La iglesia primitiva se reunía como una familia, partiendo el pan en las casas de los demás (Hechos 2:46; 5:42). A los efesios, Pablo les dijo: "Así que ya no sois extranjeros ni advenedizos, sino conciudadanos de los santos, y miembros de la familia de Dios" (Efesios 2:19).
Con la vida del primer siglo centrada en el hogar, no era inusual que familias enteras se convirtieran al mismo tiempo. Cornelio y toda su familia temieron a Dios y se salvaron gracias al ministerio de Pedro (Hechos 10:1-11:18). Una mujer de negocios llamada Lidia fue bautizada en Filipos con toda su familia (Hechos 16:15). El carcelero de Filipos y toda su familia creyeron en el Señor y se salvaron (Hechos 16:31-34). Y en Corinto, "Crispo, el principal de la sinagoga, creyó en el Señor con toda su casa" (Hechos 18:8).
La iglesia cristiana en su conjunto se considera una familia; por tanto, el cuerpo de Cristo comparte la obligación mutua de tratar a sus miembros con especial cuidado: "Así que, según tengamos oportunidad, hagamos bien a todos, y mayormente a los de la familia de la fe" (Gálatas 6:10). Esta obligación puede considerarse nuestro deber o responsabilidad familiar.
Primera de Pedro 1:22 dice: "amaos unos a otros entrañablemente" (ver también 2 Pedro 1:7; 1 Juan 3:11; 4:7). Juan enseña que la gentileza y la hospitalidad son esenciales para la familia de Dios y que el fracaso en esta área es una ofensa grave (3 Juan 1:10). Pablo instruyó a Timoteo para que respetara a un hombre mayor de la iglesia, como lo haría con su padre, y para que tratara "a los más jóvenes, como a hermanos; a las ancianas, como a madres; a las jovencitas, como a hermanas, con toda pureza" (1 Timoteo 5:1-2).
La familia de la fe también debe proteger a sus miembros de los falsos maestros, a quienes no se debe brindar hospitalidad ni apoyo (2 Juan 1:10-11). Los líderes de la familia tienen una responsabilidad aún mayor de cuidar del hogar: "Y ahora, una palabra para ustedes los ancianos en las iglesias. . . . Como anciano igual que ustedes, les ruego: cuiden del rebaño que Dios les ha encomendado. Háganlo con gusto, no de mala gana ni por el beneficio personal que puedan obtener de ello, sino porque están deseosos de servir a Dios. No abusen de la autoridad que tienen sobre los que están a su cargo, sino guíenlos con su buen ejemplo. . . . Del mismo modo, ustedes los más jóvenes tienen que aceptar la autoridad de los ancianos; y todos vístanse con humildad en su trato los unos con los otros" (1 Pedro 5:1-5, NTV).
Los líderes deben dar ejemplo mediante el servicio, del mismo modo que Jesucristo guía a Sus seguidores. Él no "se enseñorea" de sus ovejas, empujándolas y zarandeándolas, sino que las guía caminando delante de ellas y mostrándoles cómo deben vivir (Juan 10:4).
Ante todo, los miembros de la familia de la fe deben andar "en amor, como también Cristo nos amó, y se entregó a sí mismo por nosotros, ofrenda y sacrificio a Dios en olor fragante" (Efesios 5:2). Debemos ser sumisos unos con otros (Efesios 5:21) y "con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor, solícitos en guardar la unidad del Espíritu en el vínculo de la paz" (Efesios 4:2-3).
Pablo dijo a los tesalonicenses: "no os canséis de hacer bien" (2 Tesalonicenses 3:13). Instó diligentemente a los miembros de la familia de la fe a tratarse unos a otros de manera digna de su llamado (Efesios 4:1) y a librarse "de toda amargura, furia, enojo, palabras ásperas, calumnias y toda clase de mala conducta. Por el contrario, sean amables unos con otros, sean de buen corazón, y perdónense unos a otros, tal como Dios los ha perdonado a ustedes por medio de Cristo" (Efesios 4:31-32, NTV).
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¿Qué es la familia de la fe que se menciona en Gálatas 6:10?
