Pregunta
¿Se rió Jesús alguna vez?
Respuesta
Durante mucho tiempo ha existido la idea de que Jesús nunca se reía. Tradicionalmente, las pinturas de Jesús han tendido a representaciones melancólicas de un Salvador sombrío y serio. Es cierto que Jesús se convirtió en aquel que llevó nuestro pecado (1 Pedro 2:24) y que Él fue "despreciado y desechado entre los hombres, varón de dolores, experimentado en quebranto" (Isaías 53:3). Jesús fue rechazado en Su ciudad natal (Marcos 6:1–6), lloró en la tumba de un amigo (Juan 11:35), y por supuesto experimentó la cruz. Sin embargo, esto no significa que Jesús nunca tuvo un momento de alegría o que nunca tuviera ocasión de reír.
La imagen de Jesús que encontramos en los Evangelios es la de una personalidad bien equilibrada y atractiva. Él cargaba niños en Sus brazos, ¿y qué niño quiere estar cerca de alguien que nunca ríe (Marcos 10:16)? Lo acusaron por ser demasiado alegre en ocasiones (Lucas 7:34). Le dijo a los discípulos de Juan que no era un momento de luto (Mateo 9:15).
El simple hecho de que los humanos tengamos un sentido del humor indica que Dios también lo tiene, ya que estamos hechos a Su imagen. ¡La existencia de pingüinos, ornitorrincos y cachorros también es un argumento de peso a favor del sentido del humor de Dios! Jesús, como el Hijo de Dios, comparte los atributos del Padre, incluido el sentido del humor.
Como Hijo del Hombre, Jesús comparte una completa experiencia humana. No podemos imaginar la vida sin risa; incluso aquellos en circunstancias difíciles han conocido temporadas de alegría. Todo el mundo ríe y aprecia el buen humor. Decir que Jesús nunca expresó alegría a través de la risa es similar a negar Su plena humanidad.
Jesús mostró un sentido del humor en Su enseñanza. El comentario de Jesús sobre la "viga" en el propio ojo es una exageración intencional, y una que provoca risa de hecho (Mateo 7:3–5). Además, la imagen incongruente de un camello pasando por el ojo de una aguja contiene humor (Mateo 19:24).
Jesús fomentó la risa alegre, sobre todo en las Bienaventuranzas, que se registran en Mateo 5 y Lucas 6. Jesús dijo: "Bienaventurados los que lloran ahora, porque ellos recibirán consolación". Jesús habló de regocijo en Sus parábolas en Lucas 15 —la oveja perdida, la moneda perdida y el hijo pródigo fueron todos encontrados. El resultado en cada caso fue un gran regocijo. Aún más revelador es que Jesús contó estas historias como ilustraciones del "gozo delante de los ángeles de Dios por un pecador que se arrepiente" (Lucas 15:10).
Jesús tenía una misión seria que cumplir en este mundo, pero no era alguien que estuviera serio todo el tiempo. No hay un versículo en la Biblia que diga: "Jesús se reía", pero sabemos que Él se puso en nuestro lugar completamente y sintió todas nuestras emociones. La risa es parte de la vida, y Jesús realmente vivió.
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