Pregunta
¿Cuál debe ser el punto de vista de un cristiano acerca del materialismo?
Respuesta
El materialismo se define como "la preocupación por las cosas materiales en lugar de las cosas intelectuales o espirituales". Cuando un cristiano se preocupa por las cosas materiales, está equivocado definitivamente. Esto no significa que no podamos tener cosas materiales, sin embargo, la obsesión por obtener y preocuparse por las "cosas" es algo peligroso para el cristiano, por dos razones.
Para empezar, cualquier preocupación, obsesión o fascinación por cualquier cosa que no sea Dios es pecaminosa y desagrada a Dios. Se nos manda a amar "al Señor tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas" (Deuteronomio 6:5), que según Jesús es el primer y más grande mandamiento (Mateo 22:37-38). Por lo tanto, lo único de lo que podemos (y debemos) ocuparnos de manera permanente es de Dios. Sólo Él es digno de toda nuestra atención, amor y servicio. Ofrecer esto a cualquier otra cosa, o a alguien, es idolatría.
En segundo lugar, cuando nos preocupamos de lo material, fácilmente nos dejamos arrastrar por el "engaño de las riquezas" (Marcos 4:19), pensando que seremos felices o nos sentiremos satisfechos o contentos si tenemos algo más de lo que buscamos. Esta es una mentira del padre de la mentira, Satanás. Él quiere que persigamos algo que él sabe que no nos satisfará, para evitar que busquemos la única cosa que nos puede satisfacer: Dios mismo. Lucas 16:13 dice: "No podéis servir a Dios y a las riquezas". Tenemos que tratar de contentarnos con lo que tenemos, pero el materialismo es todo lo contrario a ese contentamiento. Nos lleva a esforzarnos por conseguir más y más y más, diciéndonos que eso será la solución a todas nuestras necesidades y sueños. La Biblia nos dice que "la vida del hombre no consiste en la abundancia de los bienes que posee" (Lucas 12:15) y que debemos buscar "primeramente el reino de Dios y su justicia" (Mateo 6:33).
Si el materialismo hubiera llegado a satisfacer a alguien, sería a Salomón, el rey más rico de la historia. Lo tenía absolutamente todo e incluso más que cualquier otra persona, y sin embargo se dio cuenta de que todo era inútil y sin valor. No produjo la felicidad ni la satisfacción que anhelan nuestras almas. Declaró: "El que ama el dinero, no se saciará de dinero; y el que ama el mucho tener, no sacará fruto" (Eclesiastés 5:10). Finalmente, Salomón aconseja: "Teme a Dios, y guarda sus mandamientos; porque esto es el todo del hombre" (Eclesiastés 12:13).
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¿Cuál debe ser el punto de vista de un cristiano acerca del materialismo?
