Pregunta
¿Qué son el miafisismo y el difisismo?
Respuesta
Los términos miafisismo y difisismo se utilizan para explicar la naturaleza de la encarnación y cómo se debe pensar en Jesús como Dios y hombre a la vez.
El difisismo es la posición que sostiene que Jesús es una persona de una sustancia pero con dos naturalezas diferentes: una divina y una humana. Este término proviene del griego duo para "dos" y physis para "naturaleza".
El miafisismo es la posición que sostiene que Jesús es una persona de una sustancia con una sola naturaleza, completamente integrada, que es a la vez completamente humana y completamente divina. Este término proviene del griego mia para “uno” y physis para “naturaleza”.
La verdadera diferencia radica en si Cristo tiene dos naturalezas o una. El problema no es si Cristo es completamente Dios y completamente humano, sino de qué manera es ambos. La Biblia nunca responde explícitamente a estas preguntas, pero los cristianos que creen en la Biblia intentan encontrar la posición que mejor explica toda la evidencia bíblica. Además, cada una de estas posiciones tiene implicaciones que necesitan ser abordadas. Ayuda entender el miafisismo y difisismo en contraste uno con otro y en relación con otras opiniones.
Apollonarius, quien se convirtió en obispo de Laodicea en 361, enseñó que Jesús tenía un cuerpo humano y una naturaleza divina, sin una mente o espíritu humano. Sin embargo, esto haría que Jesús fuera algo distinto a un humano genuino, y el Apolinarismo fue rechazado por el Concilio de Alejandría en 362 y el Concilio de Constantinopla en 381.
Otra posición propuesta fue la de Nestorio, quien se convirtió en obispo de Constantinopla en 428. Esta posición sostiene que Jesús tenía dos naturalezas tan divididas que en realidad era dos personas. Sin embargo, esta posición fue rechazada, ya que las Escrituras dejan claro que Jesús es una sola persona y no hay indicación de que un Jesús humano hiciera algo independientemente de un Jesús divino, o viceversa.
Otra posición, la posición monofisita, también llamada Eutiquianismo en honor a Eutiques, un líder de la iglesia que vivió entre 378 y 454, sostiene que Jesús tenía una sola naturaleza en la que la naturaleza humana fue completamente absorbida por la divina y esencialmente se convirtió en un tercer tipo de naturaleza. Por lo tanto, la naturaleza de Jesús era más que humana, pero menos que divina. Una variación de esto es que la naturaleza humana de Jesús fue completamente absorbida en su naturaleza divina, de modo que solo quedó la divina. Esto sería similar al Apolinarismo, mencionado anteriormente.
La posición ortodoxa finalmente formulada en el Concilio de Calcedonia en 451 intentó dar cuenta de todos los datos bíblicos. El concilio afirmó que Jesús es una persona con dos naturalezas, una divina y una humana. Él es genuinamente humano y genuinamente divino. Jesús exhibe características de ambos. Puede estar exhausto, dormido en el barco, y luego despertarse y ordenar a la tormenta que se calme (Marcos 4:37-41). Puede ser tentado pero no pecar (Hebreos 4:15).
Algunos agrupan el monofisismo y el miafisismo juntos. Sin embargo, las iglesias no calcedonias de hoy que oficialmente adoptan el miafisismo (un número de iglesias ortodoxas orientales) dicen que afirman que Jesús es completamente divino y completamente humano en su naturaleza y que sus diferencias con los difisitas son meramente semánticas.
Algunos teólogos cristianos se preocupan mucho por diferencias como estas. Para el cristiano promedio en tiempos modernos, tales preguntas y distinciones pueden parecer insignificantes, si no abrumadoras. A veces, los teólogos pueden profundizar demasiado en áreas de misterio y llegar a conclusiones dogmáticas que pueden ir más allá de las propuestas directas de las Escrituras. Del mismo modo, a veces los cristianos ordinarios no se preocupan por las implicancias más difíciles de las posiciones y formulaciones teológicas, en favor de simplemente “Amo a Jesús” o “Jesús me ama”. Ambos errores deben ser evitados. Deberíamos preocuparnos profundamente por estas cosas sin ser dogmáticos donde las Escrituras no nos han dado declaraciones claras.
La Escritura no aborda directamente si Jesús tenía dos naturalezas o una sola naturaleza completamente integrada que no confundía o diluía sus cualidades humanas o divinas. En algunos casos, puede ser una cuestión semántica. Si los miafisitas afirman la plena deidad y la plena humanidad de Jesús y también afirmen que en Su muerte fue un representante adecuado de la raza humana para que pudiera expiar nuestros pecados como el segundo Adán (Romanos 5:12-20), entonces parece que son completamente ortodoxos en esta área, aunque su posición está cerca de (y muchas veces igualada con) una que ha sido considerada herética. En otros casos, si la posición de uno conduce a implicaciones que son claramente antibíblicas (negar la humanidad o la deidad de Cristo, negando así su capacidad de representarnos en la cruz), entonces la acusación de herejía está justificada.
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