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Pregunta

¿Qué es la neuroteología?

Respuesta


La neuroteología es una ciencia relativamente nueva que explora la relación entre el cuerpo y las experiencias religiosas. Estas "experiencias" pueden incluir meditación, experiencias cercanas a la muerte, estados de trance, la sensación de ser uno con el universo o encuentros con seres sobrenaturales. No hay determinación si estas experiencias son imaginarias o reales, y se desconoce si la experiencia provoca cambios en el cerebro o si el cerebro crea la experiencia. La palabra neuroteología fue acuñada por primera vez por Aldous Huxley en su novela de 1962, Island, y ha aparecido en varias publicaciones desde entonces. Hasta hace poco, la neuroteología ha luchado por recibir respeto de la comunidad científica, especialmente en los campos de la medicina y la psicología.

La investigación en neuroteología comenzó mucho antes que Huxley, en 1842, y durante mucho tiempo se centró en documentar experiencias inducidas por drogas alucinógenas. El ocultista Aleister Crowley estudió los efectos de combinar la meditación con el uso de hachís y peyote: creía que el hachís era útil solo para mostrar a los meditadores menos experimentados lo que eventualmente experimentarían sin la droga. Más tarde, en la década de 1980, se realizaron pruebas ligeramente más científicas en las que se expuso a los sujetos a un campo magnético débil y se les pidió que describieran lo que sentían. Algunos dijeron que sentían otra presencia, pero, dado que a muchos sujetos se les dijo de antemano para qué era el experimento, los resultados no se consideran válidos.

El refinamiento de la neuroimagen proporcionó un método de investigación más cuantitativo. Aquellos que estudian la respuesta neurológica de una persona a las experiencias religiosas usan la resonancia magnética funcional (fMRI) para medir el flujo sanguíneo a varias partes del cerebro. Luego, los investigadores comparan los cerebros en reposo o involucrados en una actividad neutral y no religiosa con cerebros que experimentan algún tipo de trascendencia. Usando fMRI, los científicos han descubierto que recitar las Escrituras (de cualquier religión) se correlaciona con una actividad distinta en ciertas secciones de los cerebros; los sujetos que tienen una experiencia religiosa más intensa muestran aún más actividad, al igual que aquellos que practican cosas como la oración o la meditación de manera regular. Si un agnóstico o ateo recita las Escrituras, la actividad cerebral correspondiente no ocurre.

Andrew Newberg, M.D., Eugene d’Aquili, y sus coautores escribieron en Why God Won’t Go Away: Brain Science and the Biology of Belief,

“La sensación que los budistas llaman 'unidad con el universo' y los franciscanos atribuyen a la presencia palpable de Dios no es una ilusión ni una manifestación de pensamiento desiderativo sino más bien una cadena de eventos neurológicos que pueden ser objetivamente observados, registrados y realmente fotografiados. La conclusión ineludible es que Dios está cableado en el cerebro humano."

La neuroteología revela que aquellos en un estado espiritual profundo tienen menos actividad en la parte de sus cerebros que distingue entre el yo y el no yo. Los investigadores también han descubierto que practicar la meditación o la oración fortalece partes del cerebro, y un ejercicio demostró que una cantidad moderada de meditación mejoró la memoria de las personas con demencia después de solo ocho semanas.

¿Qué significa? Los científicos tienen un largo camino de investigación por delante antes de que puedan decir con certeza. ¿Podrían las experiencias religiosas alterar las vías neuronales del cerebro? Ciertamente, si la adicción puede alterar el cerebro, entonces la exposición continua a estímulos mentales puede. ¿Tiene la sobrenaturalidad una influencia directa? Considerando que no parece haber diferencia entre los escaneos realizados en cristianos y los realizados en practicantes de otras religiones, esta pregunta es más ambigua. Ciertamente, Dios hizo nuestros cerebros para responder al mundo espiritual. Cómo y en qué grado sucede eso es desconocido.

La neuroteología es una mirada interesante a cómo Dios hizo el cerebro humano. Se necesita mucha más investigación antes de que se puedan sacar conclusiones. Hasta entonces, podemos llevarnos esto: tener un hábito de oración aumenta la función de la memoria en aquellos con trastornos cerebrales. Otra razón más para hablar con Dios (ver 1 Tesalonicenses 5:17).

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