Pregunta
¿Qué es el paralelismo antitético en la poesía hebrea?
Respuesta
Uno de los principales recursos literarios de la poesía hebrea es el paralelismo. A menudo, el paralelismo es sinónimo: la misma idea se repite con palabras diferentes, una al lado de la otra (ver Salmo 40:13). El paralelismo antitético proporciona una antítesis o contraste. Un versículo que contenga paralelismo antitético reunirá ideas opuestas en marcado contraste. En lugar de decir dos veces lo mismo, dice una cosa y luego otra distinta.
El paralelismo antitético en Eclesiastés 10:2 es bastante evidente:
"El corazón del sabio está a su mano derecha,
mas el corazón del necio a su mano izquierda".
Dos corazones, dos direcciones. El corazón del sabio desea una cosa, y el corazón del necio desea algo completamente distinto. Sus inclinaciones son antitéticas.
A menudo, pero no siempre, el paralelismo antitético se establece con la conjunción pero. He aquí otro ejemplo, de Proverbios 19:16:
"El que guarda el mandamiento guarda su alma;
Mas el que menosprecia sus caminos morirá".
De nuevo, tenemos dos ideas en antítesis. Una persona sigue los consejos y vive así con seguridad, mientras que otra menosprecia su vida y se encamina hacia los problemas. En este proverbio, tenemos un par de cosas que no parecen completamente opuestas, y esto es lo que da riqueza a la poesía.
"Guarda su alma" contrasta perfectamente con "morirá" en Proverbios 19:16. Es una elección entre la vida y la muerte. Pero, estrictamente hablando, "guarda el mandamiento" no es lo contrario de "menosprecia sus caminos". La poesía requiere que hagamos un poco de lectura entre líneas. Podemos empezar haciéndonos la pregunta: ¿cómo es que no guardar los mandamientos equivale a menospreciar los propios caminos? La respuesta podría ser algo así: la desobediencia trae la destrucción, por lo que la rebelión voluntaria equivale a despreciar la propia vida. El proverbio comunica más de lo que parece. El significado completo se podría expresar de esta manera
"El que guarda el mandamiento ama su vida y la conservará (porque el mandamiento es sano),
pero el que desobedece los mandamientos desprecia su vida y morirá".
Proverbios 10:2 contiene otro ejemplo de paralelismo antitético:
"Tesoros mal adquiridos no aprovechan,
Pero la justicia libra de la muerte" (NBLA).
O, para completar el significado:
"Los tesoros mal adquiridos conducen a la muerte y carecen de valor,
pero la justicia, que se niega a engañar a los demás, conduce a la vida, a un gran valor".
A veces, los poetas hebreos utilizaban una combinación de estilos paralelos. Considera las palabras de la Sabiduría personificada en Proverbios 8:35-36:
"Porque el que me halla, halla la vida
Y alcanza el favor del Señor.
Pero el que peca contra mí, a sí mismo se daña;
Todos los que me odian, aman la muerte" (NBLA).
Las dos primeras líneas presentan un paralelismo sinónimo: hallar la "vida" equivale a recibir el "favor". Las líneas 3 y 4 también presentan ideas sinónimas: "daño" equivale a “muerte”. Sin embargo, las dos mitades de la cuarteta contrastan entre sí. (Las dos primeras líneas, tomadas en conjunto, describen a alguien que encuentra la Sabiduría. Los dos últimos versos describen el destino de quien "odia" la Sabiduría y, por tanto, no la encuentra.
Gran parte de la Biblia se escribió originalmente en forma poética. Los Salmos, los Proverbios, el Cantar de los Cantares, el Eclesiastés y las Lamentaciones son casi totalmente poéticos. La mayoría de los profetas también escribieron en poesía, algunos de ellos de forma exclusiva. Dado que la poesía está tan presente en los escritos hebreos, es beneficioso para el estudiante de la Biblia estudiar la estructura y las formas del paralelismo.
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