Pregunta
¿Qué significa que toda palabra de Dios es limpia (Proverbios 30:5)?
Respuesta
El escritor identificado como Agur dice: "Toda palabra de Dios es limpia; Él es escudo a los que en él esperan" (Proverbios 30:5).
La afirmación de Agur de que toda palabra de Dios es limpia indica que las palabras del Señor y Sus promesas son dignas de nuestra confianza porque han sido probadas, comprobadas y se ha demostrado que son verdaderas. En el hebreo original, el término traducido como "limpia" significa "probada como verdadera o digna de confianza, impecable". La palabra está relacionada con la fundición, o a ser refinado y purificado por el fuego, como en el Salmo 12:6 (NBLA): "Las palabras del Señor son palabras puras, plata probada en un crisol en la tierra, siete veces refinada".
La Palabra de Dios no contiene ninguna mezcla de impurezas, errores o imperfecciones.
Cada palabra se refiere a cada declaración y revelación del registro inspirado o, en otras palabras, a todo lo que Dios ha dicho en las Escrituras. La Palabra de Dios es la fuente última, infalible y fiable de la verdad. Cada palabra es impecable, perfecta y sincera. No hay en ella el menor indicio de falsedad, corrupción o deficiencia.
Las promesas del Señor han resistido todas las pruebas posibles del mundo real. "Sumamente pura es tu palabra, y la ama tu siervo", afirma el salmista (Salmo 119:140). Podemos depositar nuestra confianza en Dios y en Su Palabra para que nos protejan como un escudo: "El camino de Dios es perfecto. Todas las promesas del Señor demuestran ser verdaderas. Él es escudo para todos los que buscan su protección" (2 Samuel 22:31, NTV; ver también Salmo 18:30).
Además de ofrecer protección, toda palabra de Dios es limpia en el sentido de que proporciona luz y dirección a quienes confían en ella: "Los preceptos del Señor son rectos, que alegran el corazón; el mandamiento del Señor es puro, que alumbra los ojos" (Salmo 19:8, NBLA). La Palabra de Dios es «una lámpara» para guiar nuestros pies y "una lumbrera" para iluminar nuestro camino (Salmo 119:105).
La Palabra de Dios es limpia, y está segura de cumplir el propósito que el Señor se ha propuesto (Jeremías 1:12; 23:29; Isaías 46:10-11; 55:10-11; 1 Tesalonicenses 2:13). "No faltó ni una palabra de las buenas promesas que el Señor había hecho a la casa de Israel. Todas se cumplieron", declara Josué 21:45, NBLA. Cada palabra que Dios dirige a la humanidad se da con un propósito que Él cumplirá: "Porque Yo, el Señor, hablaré, y toda palabra que diga se cumplirá. No se demorará más. . . .hablaré la palabra y la cumpliré, declara el Señor Dios" (Ezequiel 12:25, NBLA).
La Palabra de Dios es viva, poderosa y capaz de penetrar hasta lo más profundo del alma humana (Hebreos 4:12; Juan 6:63; 1 Pedro 1:23). A través de Su Palabra, Dios se revela a la humanidad. Llegamos a saber quién es Dios y entramos en relación con Él a través de Su Palabra (Lucas 24:27, 44-45; Juan 5:39). Dios nos enseña, reprende, corrige, prepara y equipa para toda buena obra por medio de Su Palabra (2 Timoteo 3:16-17). Toda palabra de Dios debe recibirse como leche espiritual pura -alimento para nuestras almas-, para que por ella crezcamos hasta la plena experiencia de la salvación (1 Pedro 2:2).
La Palabra de Dios es limpia y, por tanto, tiene un efecto purificador en quienes la aman y obedecen (Salmo 119:9; Efesios 5:26). Jesús dijo a Sus discípulos: "Ustedes ya han sido podados y purificados por el mensaje que les di" (Juan 15:3, NTV). El apóstol Pablo explicó que, como seguidores de Cristo, que es la iglesia, es "santa y limpia al lavarla mediante la purificación de la palabra de Dios" para ser presentada como Su esposa, "una iglesia gloriosa, sin mancha ni arruga ni ningún otro defecto" (Efesios 5:26-27, NTV).
Toda palabra de Dios es limpia, nos recuerda que la Biblia en su autógrafo original es infalible e inerrante. Todo en ella es verdad. Su autor es Dios, que no comete errores. Su Palabra es la autoridad final (Salmo 119:89; Gálatas 3:10).
Puesto que toda palabra de Dios es limpia, impecable y completa, Agur dice en Proverbios 30:6: "No añadas a sus palabras, para que no te reprenda, y seas hallado mentiroso". ¿Cómo podemos intentar mejorar lo que ya es perfecto? Por eso se nos advierte que no añadamos ni quitemos nada a la Palabra de Dios (Deuteronomio 4:2; 12:32; Apocalipsis 22:18).
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¿Qué significa que toda palabra de Dios es limpia (Proverbios 30:5)?
