Pregunta
¿Qué significa que Jesús creó todas las cosas visibles e invisibles (Colosenses 1:16)?
Respuesta
La Biblia establece que Jesucristo es Dios: "Pues en Cristo habita toda la plenitud de Dios en un cuerpo humano" (Colosenses 2:9, NTV; ver también Hebreos 1:3). Puesto que Jesús es Dios, también es Creador del universo (Hebreos 1:2). Enseñando sobre la preeminencia o supremacía de Cristo, el apóstol Pablo escribe: "Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él" (Colosenses 1:16). Por medio de Su Hijo Jesús, Dios hizo todo lo que podemos ver, además de todas las cosas que no podemos ver.
Todas las cosas "que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles" es la forma expresiva que tiene Pablo de decir que Jesús lo hizo absolutamente todo. No hay nada que Jesús no haya creado. El apóstol Juan lo expresó así: "Todas las cosas fueron hechas por medio de Él, y sin Él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho" (Juan 1:3, NBLA). Dios Padre es el arquitecto de la creación. Él determinó que todas las cosas llegaran a existir. Pero Jesús, Su Hijo, es el agente que llevó los planes de Dios a la realidad viva y palpitante. "A través de su imaginación y poder creativos, existe el orden creado" (Melick, R., Philippians, Colossians, Philemon, Vol. 32, 1991, Broadman & Holman Pub., p. 217 - Traducción propia).
En la época en que escribió Pablo, los falsos maestros se estaban introduciendo en la iglesia y trastornando la verdad sobre la naturaleza de Cristo como Dios. Sus creencias probablemente incluían la adoración de ángeles y otros seres invisibles. En Colosenses 1:16, Pablo se refiere a estas entidades invisibles como "tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades". La Nueva Traducción Viviente traduce las "cosas invisibles que no podemos ver" como "tronos, reinos, gobernantes y autoridades del mundo invisible".
Un poco más adelante, Pablo explica que Jesucristo "[despojó] a los principados y a las potestades, los exhibió públicamente, triunfando sobre ellos en la cruz" (Colosenses 2:15). El apóstol advierte a los cristianos colosenses que no se dejen persuadir por falsos maestros: "Nadie los defraude de su premio deleitándose en la humillación de sí mismo y en la adoración de los ángeles, basándose en las visiones que ha visto, envanecido sin causa por su mente carnal" (Colosenses 2:18, NBLA). Pablo se pregunta por qué los verdaderos creyentes recurrirían a adorar a los ángeles y a los poderes invisibles cuando Jesucristo, que los creó, reina por encima de todo (ver Hebreos 1:4). Y continúa: "Pues si habéis muerto con Cristo en cuanto a los rudimentos del mundo, ¿por qué, como si vivieseis en el mundo, os sometéis a preceptos" (Colosenses 2:20).
Los falsos maestros intentaban minimizar la preeminencia de Cristo, rebajándolo al mismo nivel que los poderes invisibles, los ángeles y los gobernantes del mundo invisible. Pablo rebate esta noción ridícula y espiritualmente inmadura con los hechos sobre Jesús. Como Creador de todas las cosas visibles e invisibles, la autoridad de Cristo supera a cualquier otra criatura terrenal y ser espiritual. Solo Él es digno de nuestra adoración (1 Timoteo 1:17; Juan 5:23; Apocalipsis 5:12-13). Saber quién es Cristo y mantener ese sólido fundamento es nuestra mejor defensa contra los falsos maestros y sus desviaciones de la verdad.
No hay nada fuera del alcance de la soberanía de Cristo. Jesús es preeminente en relación con toda la creación, tanto la visible como la invisible. La creación visible incluye todo lo que podemos ver con nuestros ojos. Las plantas, los animales, la humanidad, la vida marina, el sol, la luna, las estrellas y los planetas, las montañas, los valles, los bosques, los ríos, los lagos, los océanos y los mares son obra de Jesús. La creación invisible incluye todo lo que es imposible ver con nuestros ojos: todo lo que existe en el reino espiritual. Puesto que todas las cosas—tanto visibles como invisibles, naturales y sobrenaturales—fueron creadas por y a través de Jesucristo, todas están sujetas a Su autoridad. Él es el Amo y Comandante de todas ellas.
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¿Qué significa que Jesús creó todas las cosas visibles e invisibles (Colosenses 1:16)?
