Pregunta
¿Qué son los oráculos de Dios?
Respuesta
Hay varios pasajes de la Biblia que mencionan los oráculos de Dios. En el Nuevo Testamento, el término oráculos de Dios se refiere a la Palabra de Dios; en el Antiguo Testamento, a veces se refiere a una parte del templo. No todas las traducciones al español contienen la frase oráculos de Dios, por lo que depende de la versión de la que se esté leyendo.
La frase griega del Nuevo Testamento que a veces se traduce como "oráculos de Dios" es logion Theou (logion es la forma plural de logos). "Palabras de Dios" es una buena traducción. La NBLA pone "oráculos de Dios". Esta también es una buena traducción, siempre que definamos oráculo adecuadamente.
En el uso moderno, la palabra oráculo suele referirse a una persona, concretamente a un sacerdote o médium, a través del cual hablan dioses o espíritus. Un oráculo también puede ser el lugar donde el sacerdote o médium recibe mensajes divinos. Sin embargo, una definición más antigua de oráculo, y la que utilizan algunos traductores de la Biblia, es "un mensaje de Dios". Los "oráculos de Dios" en el Nuevo Testamento son los mensajes o palabras de Dios. En Hechos 7:38 (NBLA), Esteban habla de cómo Moisés recibió "oráculos divinos para darnos", una referencia a la naturaleza vivificante de la Palabra de Dios.
Romanos 3:2 (NBLA) menciona los oráculos de Dios en la NBLA: "Grande, en todo sentido. En primer lugar, porque a ellos [Judíos] les han sido confiados los oráculos de Dios". Pablo destaca el hecho de que a los judíos que recibieron, copiaron y conservaron el Tanaj se les había confiado la mismísima Palabra de Dios. Esto suponía una ventaja para los judíos, pues significaba que primero se les predicaría el Evangelio a ellos y luego a los gentiles. Por supuesto, esta ventaja sólo era aplicable a los que creyeran en el evangelio, como afirma Pablo en los versículos que siguen. En verdad, la buena noticia, como continúa Pablo, es que tanto judíos como gentiles tienen ahora acceso a la justicia mediante la fe en Jesucristo (Romanos 3:21-22).
En Hebreos 5:12 (NBLA) también se habla de los oráculos de Dios: "otra vez tienen necesidad de que alguien les enseñe los principios elementales de los oráculos de Dios". De nuevo, los "oráculos de Dios" aquí son las palabras de Dios. El escritor de Hebreos dice que sus lectores deberían haber superado los principios básicos de la Palabra de Dios y haber pasado a temas "más sustanciosos"; en cambio, son como bebés que no están preparados para el alimento sólido (versículos 13-14).
Primera de Pedro 4:11 (NBLA) menciona las palabras [oráculos] de Dios: "El que habla, que hable conforme a las palabras de Dios". En este contexto, Pedro nos instruye para que seamos extremadamente cuidadosos con los dones que recibimos de Dios (versículo 10). Nuestras palabras deben elegirse sabiamente y hablar como si estuviéramos pronunciando las mismas palabras de Dios. Cuando citamos las Escrituras y exponemos su significado, en realidad estamos hablando los oráculos de Dios. Pedro declara el objetivo de nuestro uso de las palabras: "para que en todo Dios sea glorificado mediante Jesucristo, a quien pertenecen la gloria y el dominio por los siglos de los siglos. Amén" (versículo 11).
En 2 Samuel 16:23 (NBLA), la "palabra de Dios" que dio sabiduría a Ahitofel significa "el oráculo de Dios" o, más concretamente, "una expresión divina entregada al hombre". En otras partes del Antiguo Testamento, el "oráculo de Dios" se refiere al lugar donde moraba Dios -el Lugar Santísimo del templo que contenía el Arca del Pacto-y, por tanto, el lugar donde se podía indagar sobre la sabiduría, la voluntad y la palabra de Dios (ver 1 Reyes 6:5 y 19, Biblia del Jubileo).
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¿Qué son los oráculos de Dios?
