Pregunta
¿Cuáles son las mayores promesas de la Biblia?
Respuesta
Por un lado, elegir las mayores promesas de la Biblia es completamente subjetivo. La "mayor promesa" de Dios en la Biblia para una persona concreta va a depender de las necesidades y sentimientos de esa persona en un momento dado. Sin embargo, las promesas que se enumeran a continuación se encuentran entre las que probablemente ocuparían los primeros puestos de la lista para la mayoría de las personas:
Juan 3:16 (NBLA) "Porque de tal manera amó Dios al mundo, que dio a Su Hijo unigénito, para que todo aquel que cree en Él, no se pierda, sino que tenga vida eterna".
Proverbios 3:5-6 (NBLA) "Confía en el Señor con todo tu corazón, y no te apoyes en tu propio entendimiento. Reconócelo en todos tus caminos, y Él enderezará tus sendas".
Hebreos 13:5 (NBLA) "Nunca te dejaré ni te desampararé".
Mateo 6:25-33 (NBLA) "Por eso les digo, no se preocupen por su vida, qué comerán o qué beberán; ni por su cuerpo, qué vestirán. ¿No es la vida más que el alimento y el cuerpo más que la ropa? Miren las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros, y sin embargo, el Padre celestial las alimenta. ¿No son ustedes de mucho más valor que ellas? ¿Quién de ustedes, por ansioso que esté, puede añadir una hora al curso de su vida? Y por la ropa, ¿por qué se preocupan? Observen cómo crecen los lirios del campo; no trabajan, ni hilan. Pero les digo que ni Salomón en toda su gloria se vistió como uno de ellos. Y si Dios así viste la hierba del campo, que hoy es y mañana es echada al horno, ¿no hará Él mucho más por ustedes, hombres de poca fe? Por tanto, no se preocupen, diciendo: “¿Qué comeremos?” o “¿qué beberemos?” o “¿con qué nos vestiremos? Porque los gentiles buscan ansiosamente todas estas cosas; que el Padre celestial sabe que ustedes necesitan todas estas cosas. Pero busquen primero Su reino y Su justicia, y todas estas cosas les serán añadidas".
Isaías 40:29-31 )NBLA) "Él da fuerzas al fatigado, y al que no tiene fuerzas, aumenta el vigor. Aun los mancebos se fatigan y se cansan, y los jóvenes tropiezan y vacilan, pero los que esperan en el Señor renovarán sus fuerzas. Se remontarán con alas como las águilas, correrán y no se cansarán, caminarán y no se fatigarán".
Jeremías 29:11 (NBLA) "Porque Yo sé los planes que tengo para ustedes, declara el Señor, planes de bienestar y no de calamidad, para darles un futuro y una esperanza".
Filipenses 4:6-7 (NBLA) "Por nada estén afanosos; antes bien, en todo, mediante oración y súplica con acción de gracias, sean dadas a conocer sus peticiones delante de Dios. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará sus corazones y sus mentes en Cristo Jesús".
Salmo 23 (NBLA) "El Señor es mi pastor, nada me faltará. En lugares de verdes pastos me hace descansar; junto a aguas de reposo me conduce. Él restaura mi alma; me guía por senderos de justicia por amor de Su nombre. Aunque pase por el valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque Tú estás conmigo; tu vara y Tu cayado me infunden aliento. Tú preparas mesa delante de mí en presencia de mis enemigos; has ungido mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando. Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida, y en la casa del Señor moraré por largos días".
Marcos 11:24 (NBLA) "Por eso les digo que todas las cosas por las que oren y pidan, crean que ya las han recibido, y les serán concedidas".
Filipenses 4:13 (NBLA) "Todo lo puedo en Cristo que me fortalece".
Filipenses 4:19 (NBLA) "Y mi Dios proveerá a todas sus necesidades, conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús".
A veces las promesas de la Biblia se sacan de contexto, y la gente acaba pensando que la Biblia dice algo que en realidad no dice. Por ejemplo, ¿enseña la Biblia que podemos conseguir todo lo que queramos con la oración? No, Juan 14:13-14 debe mantenerse en su contexto. ¿Promete Dios a todo individuo vivo un "futuro y una esperanza"? No, Jeremías 29:11 debe examinarse en su contexto.
Algunas de las promesas de Dios en la Biblia tienen gran alcance e impacto. La primera promesa que Dios hizo a Adán y Eva fue muy grande: "De todo árbol del huerto podrás comer, pero del árbol del conocimiento del bien y del mal no comerás, porque el día que de él comas, ciertamente morirás" (Génesis 2:16-17, NBLA). Satanás negó rotundamente esta promesa, y en su incredulidad Adán y Eva comieron del fruto, y el pecado y la muerte entraron en el mundo. Todos nosotros, al descender de Adán y Eva, ratificamos su decisión de desobedecer a Dios, por lo que esa promesa se aplica también a nosotros (Romanos 5:12). Ésta es probablemente la promesa más terrible de la Biblia, y es la de mayor alcance: se aplica literalmente a todo el mundo.
Sin embargo, Dios no dejó a la humanidad condenada sin salida. Entró en la raza humana como hombre (Jesucristo), vivió una vida perfecta y murió, llevándose la muerte que merecíamos. Después resucitó. Cuando una persona se une a Cristo en la fe, se aplica otra promesa. Esta promesa se repite una y otra vez en lugares como Romanos 8:1-4 (NBLA): "Por tanto, ahora no hay condenación para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne sino conforme al Espíritu. Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús te ha libertado de la ley del pecado y de la muerte. Pues lo que la ley no pudo hacer, ya que era débil por causa de la carne, Dios lo hizo: enviando a Su propio Hijo en semejanza de carne de pecado y como ofrenda por el pecado, condenó al pecado en la carne, para que el requisito de la ley se cumpliera en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu".
Se mire como se mire, la promesa de la salvación por la gracia mediante la fe es la mayor promesa de la Biblia. Una vez que una persona se convierte en hijo de Dios por la fe, las demás promesas encuentran su contexto adecuado. Muchas de las promesas que a menudo se sacan de contexto en realidad sólo se aplican a un hijo de Dios. La persona que no está en Cristo sigue estando bajo la promesa mortal del castigo, y esa es la promesa que dicha persona debe oír y comprender. Es engañoso que un cristiano aplique las promesas de Dios a quien no está en Cristo.
Las dos mayores promesas se resumen en Romanos 6:23 (NBLA): "Porque la paga del pecado es muerte, pero la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro".
English
¿Cuáles son las mayores promesas de la Biblia?